Hablando de alimentos, comida regional, cariño y emprendimiento, se me viene a la mente y al corazón una palabra/verbo que siento: “conmover”.

Porque desde que vivo en Yucatán, una de las cosas que más me “conmueve” de ver preparar la gastronomía, es el amor que le ponen a los platillos las familias que los cocinan en sus emprendimientos, de generación en generación.

Hoy, Aurora me recibió en “Chismecito”, un local de comida yucateca en el primer piso del Mercado Lucas de Gálvez. Eran las 10:30 am y desde antes de las 8 am ya estaban preparando el tradicional e infaltable de cada lunes: el frijol con puerco. Allí también trabaja Ángel, de 19 años y el emprendimiento viene de su abuelita, desde hace ya varias décadas.

Hay más gente joven trabajando en Chismecito y, entre cada generación, ponen su granito de arena para hacer este manjar que, como ya nos contó la nutrióloga Kenny Luna Magaña, es un alimento que por los frijoles contiene mucho hierro y minerales que nos ayudan a hidratar el cuerpo. Además, la carne m hidrata los músculos y es saludable, siempre y cuando se coma con moderación.

La cebollita, el cilantro, salsa de tomate, aguacate y el chile habanero hacen el resto de la magia. Coman frijol con puerco, prepárenlo en casa y vayan a disfrutarlo a “Chismecito”, les va a encantar.- CGO.