Ven a Tekax, la Sultana de la Sierra te espera
Ciudad repleta de historia, magníficos espacios naturales y gente que te espera con los brazos abiertos… Así es Tekax, el municipio que hoy levanta la mano y quiere ser potencia en turismo en Yucatán. Entérate qué se trae entre manos
No, no tiene playas con mar turquesa ni arena blanca. Tampoco cenotes azules de aguas infinitas, ni mucho menos picos elevados que te llevarán a las nubes… Sin embargo Tekax se erige con presencia fuerte turística en el sur de Yucatán y te hará “tocar el cielo” con variadas actividades turísticas que van desde el turismo urbano, histórico, comunitario, hasta el ecoturismo y, por supuesto, el turismo de aventura ¿Lo sabías? Acá te lo contamos todo.
Hablar de turismo en Tekax sin hacer referencia a los texakeños, es imposible. Porque ellos -con sus energías, pilas y ganas renovadas- quieren que los vean en el mapa. Porque su municipio lo vale y porque tienen naturaleza, cultura maya antigua y de ahora –tangible, que respira, trabaja y progresa- y lugares increíbles para hacer turismo de aventura. O sea, hay opciones para todos los gustos.
Y son tantas las ganas de generar espacios para atraer al turismo que, desde ayer y por 20 días, el Ayuntamiento de Tekax presidido por el alcalde Diego Ávila junto a la Secretaría de Fomento Turístico de Yucatán (Sefotur) organizaron el diplomado “Guías de Naturaleza”, al que asisten en forma gratuita 33 guías de turismo para aprender y certificarse en la norma 09, especializada en ecoturismo y turismo de aventura.
Allí encontramos a Mark Canché, texakeño de 21 años y estudiante del cuarto semestre de la licenciatura en Turismo Alternativo en la Universidad Intercultural Maya de Quintana Roo. Mark trabaja como guía en las Grutas Chocantes de Texax y asegura que cada día que entra con turistas de distintas partes del mundo, vive una experiencia diferente. Ah, cuando lo cuenta, se le ilumina la cara.
“Desde muy pequeño me encanta el contacto con la naturaleza, por eso decidí estudiar turismo. En las Grutas Chocantes hay de todo: cristales de cuarzo, cascadas de carbonato de calcio, estalactitas y estalacmitas… Son espacios increíbles y cada vez que entro desde hace dos años para hacer de guía, me doy cuenta que son distintos porque descubro siempre algo nuevo desde mi mirada y desde la de los turistas que las visitan. Es un paseo realmente imperdible”, asegura Mark.
EN LAS GRUTAS
Y lo probamos, claro. Pedro Cervera fue nuestro guía en las Grutas Chocantes, un texakeño de mirada verde, playera militar y una gran verborragia con las manos. Pedro es, como buen guía, un tipo que habla calmado e infunde confianza y nos cuenta que esta experiencia no necesariamente te exige que desciendas a los confines de la tierra para entrar en una gruta, sino que te permite elegir a tí qué hacer.
“Está muy, muy padre… es una experiencia realmente de aventura y se adapta a cada visitante porque Tekax tiene la posibilidad de darte de todo. Hacemos, por ejemplo, senderismo con avistamiento de aves, flores y fauna y es una actividad muy disfrutable. Otros optan por el rapel, en el que descendemos a cuevas de hasta 120 metros que terminan en grutas increíbles. Tekax tiene las cinco rutas más exóticas de Yucatán”, cuenta, orgulloso.
Y lo dice con justa causa. Meterse en una gruta es como pedir permiso para entrar al inframundo maya porque siempre (siempre, siempre) está presente la cultura prehispánica en todo.
Lo ves en los colores, las texturas y las formas… Y hasta en el aire que respiramos. Descender a una cueva es volverse frío y húmedo de golpe, es chocarse con piedras (Por eso “chocantes”), ver y sorprenderte con tonalidades y formas que hasta el momento no les habías puesto nombre, maravillarte con cascadas de cristales, estalactitas y estalacmitas, todo al alcance de la mano pero lejano a la vez, porque sientes en todo momento que lo que ves forma parte de otro mundo, uno en el que se permitió entrar por un ratito, tuviste el honor de estar ahí y no te olvidarás nunca de lo que viste ahí, debajo de la tierra.
TURISMO COMUNITARIO
Otra alternativa de hacer turismo en la que Tekax hace foco y no quita el dedo del renglón es el “comunitario” que, en pocas palabras, te permite vivir en carne propia la experiencia de una comunidad. La cercanía a esta vivencia te coloca en otro lado, te acerca de manera tal a la vida en comunidad que probablemente cambie un poco la perspectiva de tu mirada. Es realmente una experiencia interesante y del gusto, sobre todo, de turistas nacionales y extranjeros.
Visitamos la comunidad “San Marcelino” de Tekax, donde viven 30 familias de forma autosustentable: viven del cultivo de la tierra, el ganado, la apicultura y las artesanías. Hablan en su totalidad maya y mantienen muy arraigadas sus costumbres ancestrales. Los niños, por ejemplo, no hablan casi español.
Luis tiene 29 años y es el comisario de San Marcelino. Motivado por ayudar a la comunidad y generar nuevos recursos, ofrece estancias en San Marcelino para que los turistas conozcan dónde y cómo viven, en un entorno de respeto absoluto a la naturaleza y las costumbres.
La comunidad San Marcelino ofrece un paseo de senderismo por distintas zonas del lugar y luego te invitan a comer: las mujeres mayas de la comunidad prepararon relleno negro y blanco, una delicia como platillo y como experiencia de degustarla con ellos y ahí, en su entorno.
Quizás cuando salgas del lugar tengas otra mirada de cómo es la vida actual de los mayas y eso siempre va a sumar. Las visitas las organiza Chultún San Marcelino, así los encuentras en Facebook.
Otra alternativa de turismo de comunidad es recorrer haciendas como “Santa María”, con una historia apasionante de Guerra de Castas, muertos, traiciones, riquezas y pobrezas absolutas, líderes, cacicazgos, dinero de la caña de azúcar y luego del henequén. Y si este paseo lo haces con Efrén Torres, de Kax Kultura (así lo puedes buscar en Facebook), vas a quedar fascinado con la forma que tiene este guía de contar las cosas. Realmente transmite un entusiasmo que te lleva a vivir el momento.
ARQUEOLOGÍA
Los sitios arqueológicos como Chacmultún son visita obligada si vas a Tekax sobre todo porque te van a dar otra mirada del entorno ¿Sabes por qué? Porque podrás ver desde lo alto la tierra, rodeado de vestigios de una ciudad maya de 300 AC (Preclásico maya).
Tekax tiene cerros de entre 80 y 100 metros de altura (le dicen “La Sultana de la Sierra”) y eso pone en otro sitio la forma de visitar sitios arqueológicos en Yucatán, donde todo es planicie al nivel del mar. Subes al sitio y si además está por ponerse el sol, escuchar la historia de cómo vivían hace miles de años los mayas allí, por qué se fueron y regresaron, es apasionante. Y si te lo cuenta Julio de Chac Bolay, mejor.
¿Qué más? La Hermita, claro. Y la contamos en este segmento de arqueología porque fue construida a principios del 1600 debajo de un adoratorio maya. Este sitio está, como Chacmultún, en lo alto de Tekax y desde allí, el Santo, patrono y custodio San Diego de Alcalá, cuida a los habitantes.
Hablar de San Dieguito de Alcalá no es fácil. Es un santo pero bastante especial. Cuando se le apareció por primera vez a un niños mayas (su imagen estaba en un pozo), les pidió que no dijeran nada que él estaba ahí, sino los castigaría. Uno de los niños no le hizo caso y le contó a sus papás, y al día siguiente murió de calentura y diarreas.
La imagen fue llevada de nuevo a la Iglesia de Tekax (preciosa, de color ocre furioso) y al día siguiente volvía a aparecer en la zona de la Ermita. Una y otra vez… Y los que la devolvían a la iglesia no la pasaban nada bien, dicen que San Dieguito los castigaba.
Por eso le hicieron su Ermita y hoy día lo adoran tanto como antes y lo celebran con prolongadas fiestas. Pero ojo, es un santo que cumple pero también castiga. El sincretismo en su máxima expresión, sin duda.
Vengan a Tekax, hay gente linda, orgullosa de su tierra y con muchas ganas de recibirlos. No hay mar ni cenotes, pero te esperan grutas, paseos a naturaleza plena, palacios mayas que están en las alturas, vida en comunidades, comida muy rica, la tranquilidad y lo pintoresco del Centro Histórico y mucha historia de un pueblo sabio, trabajador y más vivo que nunca.- Cecilia García Olivieri.
Faltó poner la cooperativa de Grutas las Sartenejas II, que está compuesto de 4 grutas, una es a rapel de 25 metros, otra de 8 metros y las otras dos es caminando, busquen en youtube o facebook: Grutas Las Sartenejas II y conozcan esta belleza.
No, no faltó poner. Buenísimo que haya otras empresas dedicadas a esto. Comparte la nota y coméntalo en tu post. Gracias!