¿Podemos salirnos del molde? ¿Probar nuevas cosas, nuevos estilos de vida? ¿Podemos soñarlo y cumplirlo? ¡Claro que sí! Y esto anduvo pululando como un sueño por la cabeza de Teófilo Pardo, un creativo -videógrafo dedicado al diseño y la construcción- desde hace tiempo y lo hizo realidad aquí, en Yucatán. Te presentamos el proyecto de ecoaldea Tierra Viva, que ya es una experiencia de vida en Mocochá y va por mucho más…

De Tamaulipas a Yucatán y de Mérida a Mocochá. Así fue el viaje que emprendió hace once años Teófilo Pardo y su esposa Carolina y hoy ese periplo sentó bases y se hizo una estilo de vida: distinto, de comunidad, sustentable y autosuficiente. “Sin fanatismos y con mucho equilibrio”, dice Teo… Para disfrutar sin duda de otra forma de vivir.

Porque los sueños se cumplen, asegura este norteño de voz que contagia pilas, energía. Y en busca de “una vida con más equilibrio y unión con la naturaleza, sin vivir tanto de lo material”, Teo y Caro emprendieron y concretaron el sueño de comprar cuatro hectáreas en Mocochá y hacer ahí “Tierra Viva”, una ecoaldea con viviendas construidas por ellos, cultivos que los alimentan, educación en casa para sus hijos y vida en comunidad. Eso sí, con luz, agua, internet y transporte, acorde a los tiempos en que vivimos.

Y como cuenta este creativo del diseño y la construcción “somos una parte pequeñita en un todo hermoso que es la naturaleza y podemos crear sinergia y buscar la fuerza colectiva porque ahí se desarrollan las grandes revoluciones y movimientos”, afirma, seguro de haber hecho realidad un sueño.

Y Tierra Viva va por más… Por una vida más autosuficiente y sustentable para los que viven ahí (que ya son mucho más que cuatro…) y se preparan para ofrecer talleres sobre agroecología y construcción de viviendas, pero que lo cuente todo Teo, aquí te dejamos nuestra plática:

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Defínete en pocas palabras, como si fuera un tweet ¿Quién es Teófilo Pardo?

Una persona a la que le gusta luchar por sus sueños, busca plenitud en su vida y ser feliz.

¿Se pueden concretar los sueños?

Sí, tal vez no todos, pero podemos cuanto menos hacer el esfuerzo por cumplir los que podamos. Y los que no se cumplan, podemos decir que hicimos el esfuerzo para vivir ese sueño y cumplirlo. Pero en general creo que los sueños se pueden cumplir.

¿Cuál es tu sueño hecho realidad?

Mi sueño hecho realidad es el que estoy dirigiendo. Hace cinco o seis años tuvimos la idea de tener una vida más en familia, más plena, fuera de lo que yo llamo “el sistema”. Ojo, no estoy en contra de eso, pero creo que puede haber una vida con más equilibrio y unión con la naturaleza, sin vivir tanto de lo material. Es difícil cumplir este sueño y para llegar a él hay que vivir algunas pesadillas, pero con mucho esfuerzo y sacrificio se logró este proyecto que vivo con mi familia y amigos.

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¿Te consideras un emprendedor?

Sí, me considero un pionero cuando algo me apasiona, se me mete en la cabeza y ya no se va a salir hasta que haga todo lo posible para lograrlo. Parte de ser emprendedor es también salir de la zona de confort, luchar por las cosas que no podíamos lograr y tener la confianza en uno de hacerlo, siempre enamorado de nuestros sueños.

Cuéntale a la gente qué es Tierra Viva y cómo empezó este sueño que ya es realidad

Tierra Viva es una ecoaldea ubicada en el municipio de Mocochá, a 20 minutos al norte de Mérida. Hace unos años con mi familia empecé a cuestionarme todo: porqué vivimos como vivimos, porqué creemos y hacemos lo que hacemos. Y empecé a investigar y leer y me enteré que había personas que pensaban diferente en cuanto a educación, vivir en comunidad, estilos de vida, alimentación, construcción de casas, todo de forma más sustentable y autosuficiente. Era algo que me vibraba desde hace tiempo y yo estaba buscando la felicidad en otro lado, porque en realidad no nos cuestionamos nada y vivimos como ese dicho que dice “Si no está roto, no lo arregles”. Lo pensé mucho, lo hablé con mi esposa e hijos y otros integrantes de mi familia y empezamos a formar este proyecto. La compra del terreno en Mocochá fue hace cuatro años, pero vivimos formalmente aquí en Tierra Viva hace dos.

De qué se trata esta vida autosuficiente y autosustentable en comunidad, cuéntanos.

Es tener más tiempo para uno y te hace vivir cosas nuevas pero que, en realidad, son un retroceso en la historia. Es ir al pasado y vivir la vida de una manera más sencilla. Es una forma de vida muy completa porque no es sólo lo que comemos (sembramos parte de nuestros alimentos), sino también cómo construimos nuestras casas, cómo criamos gallinas que producen huevos que por ahora son de autoconsumo, cómo les enseñamos a nuestros hijos en la escuela en casa (homeschooling) y cómo fluimos todos como comunidad, juntos.

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Cuéntanos sobre la construcción de las casas donde viven

Nuestras casas son de superadobe, que es una técnica de construcción que inventó el arquitecto iraní Nader khalili, que es más económica e ideal para lugares del mundo con pobreza. Implica comprar costales de rafia, rellenarlos con tierra, poco cemento y agua y se construyen casas tipo domo en forma más orgánica. Piensa que no es lo mismo entrar a un lugar cuadrado (como una vivienda tradicional) que a una con formas redondas y curvas, que te genera una sensación espacial diferente. Son casas que se pueden realizar sin conocimientos de albañilería, con tu familia o grupo de amigos.

¿Cuántas personas arrancaron con Tierra Viva y cuántos son ahorita?

Empezamos cinco personas (mi esposa, mis dos hijos y yo junto con mi tío) y después se sumó el matrimonio de Alex y Susana, mi hermano, mi cuñada y mi sobrino, mi amigo Javier y los últimos integrantes fueron Marisa y Carlos con sus dos hijitos.

¿La gente puede ser parte de Tierra Viva? ¿Cómo?

Si alguien viene, nos conoce y hay buena química, podríamos ver cómo fluye todo. Tenemos cuatro hectáreas suficientes para vender lotes. Pero en realidad no buscamos que venga gente, aunque estamos abiertos a que si alguien quiere formar parte de la comunidad, podemos ver si hacemos “click”.

¿Cómo ves a Yucatán en el emprendimiento del desarrollo sustentable? ¿Qué nos falta?

Desde que arranqué con este proyecto, me di cuenta que hay mucha gente pionera desde hace tiempo. Y vemos que hay crecimiento en el deseo de tener más conciencia social y ecológica. Las redes sociales son buenísimas para estar informado y aquí en Yucatán hay proyectos de agroecología y sustentabilidad, así que percibo que el ser humano tiene buena disposición y deseos, aunque nos falta más información y preparación y quitarnos el miedo que nos detiene para hacer ciertos cambios. No hace falta comenzar proyectos grandes y la gente tiene de manera innata ser parte de un ecosistema y todos coincidimos en eso.

¿Cómo ves a las nuevas generaciones sobre el tema de sustentabilidad?

Veo que tienen más acceso a la información, pero desafortunadamente desde la Revolución Industrial nos hemos hecho más individualistas. La información es positiva, pero las nuevas generaciones se encierran mucho en su mundo con el tema de la tecnología. Es eficiente para lograr cosas, pero los jóvenes tienen ciertas dificultades para pasar del conocimiento a la acción porque todo está muy encapsulado en “el yo”, lo que a mí me gusta, las reacciones de los demás… Es una generación que necesita aprobación.

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¿Y los niños? ¿Sientes que tienen más conciencia ecológica?

Los niños son lienzos en blanco y potencialmente susceptibles a lo que les enseñen. Creo que la esperanza existe y ojalá quieran hacer algo distinto e informarse.

En un vídeo de Tierra Viva hablas del legado de esta ecoaldea. Cuéntale a la gente de qué se trata.

Desde el inicio de Tierra Viva, el legado es para las generaciones futuras, para nuestros hijos. Creemos que lo más importante que podemos hacer nosotros tiene que ver con la familia porque es la base de la sociedad y ahí está enfocado nuestro legado. Que los más pequeños puedan seguir este camino si quieren hacerlo y que sepan que existe una forma responsable de hacerlo hacia las personas, los seres vivos y las cosas que nos rodean. Hay formas de vivir distintas y nos gusta que las personas tengan la capacidad de pensar por sí mismas.

¿Qué se viene para Tierra Viva?

La idea es que, en unos años, podamos ser un proyecto más sustentable y autosufiente para los que vivimos aquí, esa es nuestra visión final. También queremos convertirnos en un centro de enseñanza para dar talleres sobre agroecología y construcción de viviendas.

Danos un mensaje

El poder esforzarnos por cumplir lo que deseamos es posible y depende de nosotros totalmente. Vivimos un momento en el que se necesita mucho voltear a ver afuera de nosotros mismos para dejar de ver sólo nuestra propia realidad. Ahí expandes mucho tu visión porque el planeta no es sólo de seres humanos y nosotros somos una parte pequeñita de un todo hermoso que es la naturaleza. Podemos creer en hacer sinergia y comunidad y dejar el individualismo para buscar la fuerza colectiva, porque ahí se desarrollan las grandes revoluciones y movimientos.- Cecilia García Olivieri.

Los encuentras en redes sociales en FB: @Tierra Viva y en IG: @tierraviva17.