“Le pedí a Dios un milagro y llegaste tú”
Dicen que hay hijos de panza e hijos de corazón y esta historia es de amor puro e incondicional que late fuerte y nos demuestra que la maternidad es mucho intensa e incondicional de lo que imaginamos. Manuela de Jesús se convirtió en “mamá de corazón” de Cachito, un nené…