Solución a la erosión: “Existe y depende de todos”
La propuesta de realizar un trabajo de “bypass” en las playas yucatecas para evitar la erosión que cada vez es mayor y nos muestra cómo el mar se “devora” la costa es óptima y exitosa, siempre y cuando se haya estudiado antes, nos explica el biólogo marino e investigador Johnny Valdéz. Aquí el especialista nos detalla qué es el famoso “bypass” que se usa en muchas partes del mundo y para qué sirve, además de otros métodos alternativos. No te lo pierdas:
La situación en ciertas partes de la costa yucateca preocupa y ocupa. La erosión avanza y el agua se acerca cada vez más a la costa, sin dejar playa. Es como si las olas se tragaran todo y si paseas por zonas como Chelem, podrás observar que cada vez hay menos playa y pareciera que el mar va a entrar en los hogares. Y claro, para la pesca esto tampoco es bueno por la operatividad de los puertos de abrigo, fundamental para la economía de miles de familias yucatecas.
Sin embargo hay una esperanza. El gobierno del Estado con el apoyo de especialistas del Laboratorio Nacional de Resiliencia Costera de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) trabajan en un proyecto de quitar espolones de las playas yucatecas e implementar un sistema de “bypass” para que la arena regrese adonde debe y se quede ahí ¿Estamos a tiempo? ¿Es posible revertir la situación? Platicamos con el biólogo marino e investigador Johnny Omar Valdéz, quien trabaja en la Unidad de la UNAM de Sisal y nos dice que sí.
Por cierto, hablemos primero de Johnny. En febrero pasado el especialista se reunión con vecinos de Chelem y, después de estudiar el perfil de las playas chelemeñas, Valdéz concluyó en que sería de mucha utilidad instalar arrecifes artificiales (como los que fabrica la Fundación Internacional “Reef Ball”) para anticipar el rompimiento de las olas y evitar la erosión.
Aprovechamos esta ocasión y luego de la noticia que dio el Gobierno del Estado, para preguntarle a Johnny qué opina sobre el “bypass” que la Secretaría de Desarrollo Sustentable quiere realizar en las playas yucatecas, y el biólogo marino nos cuenta que es una muy buena idea, siempre y cuando haya sido estudiada y vaya de la mano con otras alternativas. Y nos lo explica así:
“El bypass es una solución que no se contrapone con otras, al contrario. Se ha hecho en muchas partes del mundo y con éxito”, señala.
Y nos cuenta cómo funciona: “Es una máquina marítima que lo que hace es tomar el sedimento que se acumula en la costa del muelle de altura y lo pasa al otro lado. Como sabemos, en la entrada de Puerto de Yucalpetén hay una playón enorme y del otro lado –hacia Chelem- hay una pérdida importante de playa. La máquina submarina funciona por medio de una bomba que toma la arena y la manda del otro lado y las corrientes marinas ayudan también a que esto ocurra y siga todo su curso natural”, detalla el especialista.
Para Johnny la erosión de las playas yucatecas puede llegar a su fin y esta podría ser una solución junto con otras técnicas y métodos. “Lo importante aquí es que estas soluciones hayan tenido estudios previos para saber si realmente son efectivas. Yo me supongo que, respecto al bypass, seguro realizaron análisis para ver si realmente funciona. El monitoreo es fundamental”, remarca.
Le preguntamos al biólogo marino si su propuesta de colocar arrecifes artificiales -bolas de concreto con huecos, que duran como 500 años y permiten que en ellas se reproduzcan y vivan la flora y fauna del lugar, además de anticipar el rompimiento de las olas y evita la erosión- puede hacer mancuerna con el bypass y nos contesta con un sí rotundo.
“Claro que sí y además de otras técnicas complementarias. En el caso de los arrecifes artificiales, los realiza la Fundación Reef Ball, que tiene representantes en México y hasta en Yucatán, a través de Javier Dajer. La organización sin fines de lucro ha realizado varios proyectos en Yucatán y Quintana Roo con éxito para proteger y recuperar playas”, señala.
DEPENDE DE TODOS
Y otro tema bien importante: para Johnny la solución existe y depende de todos, no sólo de los gobiernos.
“Hay que mejorar nuestros hábitos, proteger la duna y evitar poner estructuras que modifiquen las corrientes sin estudios previos. Mucha gente que vive en la costa quita la vegetación de las duna costera porque creen que se ve feo y eso agrava también el problema de la erosión”, detalla. Para el especialista, los gobiernos pueden ayudar a solucionar el problema “pero los que estamos día a día en la zona de la playa somos nosotros, los usuarios”, remarca.- Cecilia García Olivieri.