“Si estamos en la lucha por nuestros derechos, hay que hacerlo bien”
Negar la diversidad que nos circunda es tapar el sol con un dedo. Nos estalla en la cara, es parte de nuestra vida y el camino para vivir mejor todas, todos y todes juntes es visibilizar, empatizar y actuar en beneficio de esta sociedad diversa. Hoy, en el Día Mundial de la Visibilidad Trans, te contamos cómo la iniciativa de Ley de Inclusión Laboral Trans y No Binaria puede cambiar nuestra realidad para bien, entérate:
Es alta, delgada, tiene un vestido rosa, el cabello tirante peinado para atrás y unas cejas delineadas bien altas pero finitas que, seguramente, le cambian su expresión original, pero también son parte de ella. Sus labios hacen juego con el color del vestido y cuando posa para la foto se transforma y apoya la mano en su cintura, tipo “femme fatal”. Las uñas también hacen juego con los labios y el vestido.
Se llama Sherry De la Fontane y tuve la indiscreción de preguntarle cuántos años tiene. “Cumplo 73”, me dice, arqueando las cejas altas y finitas. Sherry es mujer desde hace más de 50 años, pero nació como varón y hoy está firme en la lucha que tienen muchas mujeres transexuales y transgénero como ella en Yucatán, México y el mundo, pidiendo visibilización y una vida digna, ni más ni menos que eso.
Sherry participó hoy con otras compañeras trans de diversas edades y lugares de Mérida y Yucatán para celebrar juntas el Día Internacional de la Visibilidad Trans y para apoyar con todo la iniciativa de Ley de Inclusión Laboral Trans y No Binaria que ayer se presentó en CDMX y se espera replicar en Yucatán para que sea una realidad lo antes posible. Este proyecto de ley contempla que al menos 3% de las plazas de la administración municipal, estatal y federal de México estén disponibles para la población trans y no binaria en el servicio público.
Y con casi 73 años, ahí está Sherry, acompañando y dando apoyo logístico. Y conste que su vida no fue fácil. “Al principio viví con muchos problemas mi decisión de cambio de identidad y sufrí muchas humillaciones, hasta de mi familia. Así que a los 20 años me fui a vivir a CDMX, pero allí era “medio varón”, no hice el cambio definitivo y a los 25 me regresé a Mérida de nuevo y nunca más me fui”, relata.
Aquí mismo, Sherry hizo comunidad con otras chicas trans y a los 25 años se puso un vestido en público por primera vez en su vida. “Fue en un concurso trans, no recuerdo si era de Señorita Yucatán, Señorita Simpatía o algo así. Recuerdo que me sentí la más hermosa del mundo”, recuerda, emocionada.
Hoy, en la tercera edad y llena de vitalidad, Sherry recuerda que pasó muchas humillaciones y que vio y vivió cosas horribles por la sola razón de ser trans. Así que aprovechamos para que, con su experiencia de vida y en pie de lucha, les da un consejo a las personas que sientan que no están bien con su identidad y quieren definirse.
“Que piensen mucho antes de hacer lo que quieran hacer, que analicen las situaciones que viven. Y que si estamos en la lucha para que se respeten nuestros derechos, hay que hacerlo bien. Todo esto que emprendemos es para beneficio de todas”, concluye.
SOBRE LA INICIATIVA DE LEY EN YUCATÁN
Durante el evento, Abigail Trillo, presidenta de Yucatrans, compartió que la asociación junto con otras colectivas del interior del estado como Ticul y Halachó, presentarán la iniciativa de la Ley de Inclusión Laboral Trans y No Binaria al Congreso de Yucatán. Apoya a Yucatrans en esta importante misión la doctora, académica y activista Ligia Vera y la ex diputada Milagros Romero, ambas siempre en lucha por la diversidad sexual en Yucatán.
En Yucatán no hay estadísticas ni censos de cuántas personas trans viven en el estado y, a nivel nacional, el INEGI tampoco analiza estos datos. Viven discriminación, humillaciones, son víctimas de prejuicios sociales y la esperanza de vida de las personas trans es muy pobre, no supera en muchos casos los 40 años.
En cuanto a empleos, Abigail detalla que las posibilidades para las personas trans son muy reducidas: pueden trabajar en estéticas, en gastronomía o dedicarse al trabajo sexual, así que esta iniciativa de ley urge, pero ellas, ellos y elles van tranquiles: “No estamos acostumbradas a correr, vamos a paso lento para llegar a nuestros logros”, enfatiza Abigail.
Sobre la ley, Ligia Vera explicó que ya platicaron para presentar la iniciativa con tres diputadas locales que se mostraron interesadas en abanderar el proyecto de ley. Por ahora Ligia prefiere no dar nombres ni partidos políticos porque esto recién está empezando y esperan que más legisladoras y legisladores se sumen.
Por su parte, Milagros Romero, señaló que es fundamental que las y los diputados que apoyen esta iniciativa, sepan cabildear y dialogar con sus colegas para que haya empatía y generosidad.
“Hay que visibilizar también que la realidad supera a cualquier ley, por eso es fundamental que haya inclusión, conciencia y responsabilidad por parte de todas, todos y todes”, remarcó.
Abigail también hizo una autocrítica para que los colectivos y asociaciones a favor de la diversidad sexual “se quiten la coronita” y trabajen juntas, juntos y juntes. Invitó a las personas que se quieran sumar a llevar la iniciativa al Congreso a que se unan.
Por su parte, Ligia Vera adelantó que se reunirán también con las cámaras empresariales para que incluyan a las personas trans y no binarias en puestos de trabajo.
Desde la tribuna, Sherry con sus casi 73 años, su vestido, labios y uñas rosas y su cejas altas y finitas, aplaudió rabiosa.- Cecilia García Olivieri.