Ridícula
Columna Pase Corto
Por Roberto Acevedo Acosta
Vaya tomada de pelo que se aventó la Liga Mx al dar a conocer las “sanciones” por los hechos ocurridos en Querétaro, ciudad que fue testigo de la barbarie entre los aficionados del Atlas y de Gallos Blancos, que dio como resultado, hasta el momento, 26 lesionados.
Todos fuimos testigos del nivel de violencia que se alcanzó en ese partido cuando las barras bravas, de ambos equipos, se enfrentaron tanto en la grada como en el campo del conjunto de Querétaro. El sentir era que la Liga Mx debía sancionar de tal manera que se dejara un precedente para que estos delincuentes no tuvieran acceso a los estadios del fútbol mexicano. Pero le tembló la mano a Mikel Arriola -presidente de la liga mexicana- quien junto con los dirigentes del fútbol azteca, resolvieron una serie de sanciones ridículas por donde se le quiera ver.
Al equipo de Querétaro lo sancionaron con jugar un año entero a puerta cerrada, una multa económica de 1.5 millones de pesos y la desafiliación de la dirigencia del equipo. Para Atlas el “castigo” fue que su barra brava no puede ir a los partidos de visita.
Con estas “sanciones ejemplares” quedan intactas las barras bravas, principales generadoras de la violencia en el fútbol mexicano. Una cosa es clara: los equipos las engendraron y ahora no saben qué hacer con ellas.