“Queremos que los hombres salgan de la jaula del modelo machista”
En Yucatán pasan cosas que empiezan pequeñas pero que se pueden volver gigantes a favor de las masculinidades libres de violencia. Y hoy tuve el gustazo de aprender qué hacen en el Centro de Atención y Reeducación para Hombres que Ejercen Violencia de Género y el psicólogo Jorge Kantún nos comparte cómo trabajan y qué se viene para 2023. Si no conocías este espacio, esta nota te va a interesar:
Vienen haciendo ruido del bueno desde hace tiempo, con o sin pandemia. Trabajan desde 2018 duro y parejo para visibilizar el tema de las masculinidades libres de violencia de género en Yucatán y este año tuvieron muy buenos resultados. Y ya están tomando nuevos impulsos para 2023.
Desde el Centro de Atención y Reeducación para Hombres que Ejercen Violencia de Género, un equipo de piscólogos coordinado por el profesional Jorge Kantún Vera no descansan ni en vacaciones. Porque así lo encontré hoy a Jorge, pero sin pensarlo un segundo estuvo al pie del cañón para esta entrevista con puros datsos frescos y novedades.
Si no lo sabías te cuento: el Centro -ubicado en la colonia Juan Pablo II- es parte de la Secretaría General de Gobierno y está adcrito también a la subsecretaría de Prevención y Reinserción Social. Allí, un equipo de psicólogos atiende a hombres que son derivados por notificación judicial y a hombres que por propia voluntad se acerca al centro para sensibilizarlos y reeducarlos en sus relaciones con parejas, ex parejas, otros hombres, familiares, hijos y amigos para que sean más justas y libres de violencia. Buscan, fundamentalmente, que los usuarios puedan ser más libres de conductas violentas y más cercanos a sus emociones para que así tengan una vida más sana. También trabajan ofreciendo cursos y talleres reflexivos en universidades y empresas, donde les pidan ellos van…
De esto platico con Jorge en esta entrevista. Este lugar es una realidad en nuestro estado y brinda un servicio a toda la comunidad de hombres que lo necesite. Conozcan a Jorge, un gran psicólogo y un hombre empático, que trabaja con su equipo con perspectiva de género y muchas ganas de que los hombres puedan sensibilizarse y vivir alejados de la violencia.
Mesas de trabajo y cursos en distintos espacios para abordar las masculinidades libres de violencia
Defínete en pocas palabras, como si fuera un tweet ¿Quién es Jorge?
Soy un aprendiz de papá. Tengo un hijo de seis años y la paternidad ha sido un punto clave en mi vida y proceso de masculinidad y de humanidad. Soy psicólogo, tengo una maestría en Psicología Aplicada en Clínica para Adultos y mi preparación ha sido en derechos sexuales y reproductivos, derechos humanos, perspectiva de género, masculinidades y violencia de género. Me preocupa mucho dejar un mundo mejor para mi hijo y para las siguientes generaciones y mi foco está en crear relaciones libres de violencia de género.
Cuéntanos qué hacen en el Centro de Atención y Reeducación para Hombres que Ejercen Violencia de Género (CAREEHVG)
Nuestra facultad es la de reeducar a hombres generadores de violencia en conductas y actitudes contra las mujeres ¿Qué hacemos? Recibimos a hombres que llegan de manera voluntaria o por notificación judicial para sensibilizarlos y reeducarlos en sus relaciones con parejas, ex parejas, otros hombres, familiares, hijos y amigos para que sean más justas y libres de violencia. Estamos convencidos de que las mujeres hacen una tarea titánica y magnífica para la atención de la violencia de género, pero siguen existiendo generadores de violencia y ese es el peso que cargamos en el centro y lo hacemos con mucha responsabilidad y respeto. Queremos que los usuarios que atendemos sean más libres de conductas violentas y más cercanos a sus emociones y familia para que tengan una vida más sana.
¿Cómo lo hacen?
En el centro somos un equipo de psicólogos que recibimos a usuarios que llegan por notificación judicial y, luego de una entrevista inicial, participan en 15 sesiones psicológicas individuales donde la atención es guiada con objetivos en cada sesión. El eje central es hablar de creencias violentas y machistas y así vamos sensibilizando para hablar de las emociones porque los hombres no tenemos una educación emocional muy basta y maquillamos muchas veces lo que sentimos con el enojo. En las sesiones explicamos la gama de emociones que existen para enfrentar sus conflictos y lograr modificaciones conductuales. Hablamos también del manejo de la ira, los celos y el autocuidado. También atendemos a hombres privados de su libertad que están en el Cereso de Mérida y en el de Tekax y periódicamente brindamos cursos reflexivos sobre masculinidades libres de violencia en universidades y empresas que lo soliciten y también en nuestro centro. Y por supuesto, atendemos a los hombres que voluntariamente se acerquen al centro.
A ver: soy hombre y me interesa tomar sesiones psicológicas con ustedes por voluntad propia ¿Cómo hago?
En estos casos tienen dos opciones para contactarnos. Personalmente estamos en la calle 41 N° 438 entre 30 y 32, en la colonia Juan Pablo II. Nuestro teléfono es el 9999 171243 y atendemos de 8 am a 3 pm. Por otro lado te ofrecemos el servicio de Whatsapp para que nos contactes al 9995 427047, este servicio lo usamos mucho y nos sirve. Nos escriben y un profesional te contacta. En menos de tres días, se la asigna al usuario un psicólogo y fecha para su proceso de terapia. Atendemos a hombres en todo el estado, así que si no se pueden acercar porque están lejos, también lo hacemos de forma virtual.
¿A qué llamamos masculinidad libre de violencia ?
A que cualquier hombre pueda vivir su vida libre de prejuicios y estereotipos y, sobre todo, alejado de la violencia. Creemos firmemente que todos podemos ser lo que queramos, siempre y cuando respetemos a los demás: mujeres, infancias, otros hombres… a todos. Queremos que los hombres salgan de la jaula de modelo tradicional machista, todos ellos son bienvenidos con nosotros.
¿Por qué es complicado el caminito de “machos a hombres”?
Porque no conocemos otra cosa. Hemos recibido una educación muy lineal y el caminito está en crecer, jugar al fútbol, tomar alcohol, iniciar la vida sexual, tener más vida sexual, trabajar, la familia… Y cualquier cosa distinta a todo esto puede ser tomada como un sacrilegio casi, casi. Vivir de esa manera nos hace ciegos a tantas opciones… Y Creemos que crecer con este modelo de hombres que “todo lo puede” es la gran meta en la vida y es difícil quitarnos ese peso y desaprender, es difícil salir de ese contexto. Y además, al patriarcado no le conviene que los hombres cambien.
¿Por qué?
Porque no le conviene que los hombres dejen de tener el poder, no pueden dejar de controlar porque hemos hecho eso siempre. Sin embargo, puedo identificar un cambio hecho por las mujeres como consecuencia de los movimientos feministas. Ellas tienen voz y presencia y como hombres hemos reaccionado y nos hemos tenido que poner a la altura del movimiento feminista. En Yucatán el cambio se da de a poco, pero cada vez hay más espacios adonde los hombres pueden acudir: estamos nosotros, hay talleres en el Instituto Municipal de la Mujer, está Cepredey que también brindando ayuda… Y la sociedad civil está cada vez más organizada para implementar cursos reflexivos sobre masculinidades libres de violencia.
En las sesiones psicológicas que ofrecen ¿Cuál es la emoción que sale más a flor de piel en los usuarios?
La emoción más fácil que sienten cuando llegan es el enojo, sobre todo los que vienen derivados por notificación de la justicia. Todos se sienten víctimas, culpan a sus ex parejas o parejas, dicen que no pueden ver a sus hijos o que temen perder sus trabajos. Poco a poco y durante las sesiones, la molestia que sienten se va suavizando y les entra una preocupación por no ver a los hijos, perder sus trabajos o sentirse señalados. Los colegas hacen un excelente trabajo de contención y acompañamiento y tratamos de volver esas sensaciones desagradables para que sean útiles y les sirvan, para que se pregunten qué pueden hacer con el miedo o la preocupación que sienten. No hablamos de emociones positivas o negativas, hablamos de emociones desagradables y agradables. Los hombres estamos comprimidos con las emociones y lograr que se descompriman es un avance.
¿Notas una permeabilidad de la masculinidad libre de violencia en las generaciones más jóvenes?
Sí, y lo vemos mucho en los grupos reflexivos en las universidades como la UADY y la Modelo. Siento que sí hay más conocimiento y sensibilidad con estos temas, aunque también siguen existiendo conductas violentas. Yo creo que los tendederos que se han hecho en las universidades (espacios para exhibir a acosadores o violadores) han generado más conciencia en los hombres jóvenes ante el acoso.
¿Qué es lo que más necesitan los hombres para lograr masculinidades libres de violencia?
Necesitan espacios seguros para hablar de lo que sienten y poder llevarlo a terapia o en grupos y pláticas reflexivas. No deben aguantarse todo y lograr abordar temas sensibles como el autocuidado, la paternidad y la familia para poder expresarse sin ser juzgados es fundamental.
¿Qué podemos hacer las mujeres para lograr masculinidades libres de violencia?
Las mujeres ya hacen demasiado, por eso esta parte de reeducarnos y sensibilizarnos nos toca a los hombres. Las mujeres pueden seguir incomodándonos con su lucha y nosotros tenemos que responder a eso.
Momento de balances al cierre de año ¿Cómo estuvo 2022 la atención en el centro?
En el centro hemos ofrecido este año 2,486 sesiones de terapia individual a 766 hombres, la mayoría entre 25 y 35 años. También hemos brindado pláticas y talleres a 190 hombres. Cabe destacar que atendemos a hombres a partir de los 18 años, mayores de edad.
¿Qué se viene en el Centro para 2023?
Tenemos la buena noticia de que ya estamos calendarizando grupos reflexivos sobre masculinidades libres de violencia para el público en general. Estamos pendientes para informarles cuándo serán.
Invita a los hombres a que se acerquen o llamen al Centro
Acérquense a nosotros porque hay cosas que necesitamos cambiar porque el machismo nos afecta a todos y como hombres tenemos que trabajar nosotros mismos para tener una sociedad más justa entre mujeres y hombres.- Cecilia García Olivieri.