Columna “Desde el Fin del Mundo”

Por Valeria Bombechio

Para muchas personas el año que se va -en este caso 2019- es sinónimo de balance, que es justamente el resultado de lo que ha entrado a nuestra vida y lo de lo que se ha ido de nuestro entorno. A todo esto se le pone una cuota de lástima o alegría. Voy a ser sincera, conmigo no cuenten.

Soy una mujer como cualquiera, y digo siempre “Lo pasado, pisado”… Y a unas horas del nuevo año se me renuevan todas las esperanzas y las desesperanzas, siento felicidad plena cuando me renuevo, en rotación y traslación permanente estoy, es aquí donde enfoco el hoy.

Les deseo, de todo corazón más amor, más ideas, más resiliencia, más sabiduría, más solidaridad, más silencios, más meditación, más buenos hábitos de salud, más lectura, más juegos en los parques, más sonrisas, más detenerse y mirar la luna.

Las cosas simples de la vida no tienen precio en el supermercado, ni en la tienda de ropa y tampoco en la de zapatos… Todo eso está ahí, pegado a tu lado, voltéate y míralo.

El 2020 es un número más, pero indica la renovación de los deseos en tiempo y forma.

Que sigan los éxitos.

Que sigan tus éxitos.

Que sigan mis éxitos.

Desde Argentina y para Yucatán entero: Felicidades.

Con todo mi amor para Sumario Yucatán.

Valeria, lectora.