Con el cambio de clima que nos dejan las lluvias, las clases arrancaron con varias ausencias de niños diagnosticados con influenza. Y ahí arranca la paranoia en las casas de si mandamos o no a los chicos a la escuela. Platicamos con el pediatra David Canché Durán al respecto, entérate:

Apenas comenzada la segunda semana de clases, la nota llegó en la libreta de kínder de su hijita: “Hay dos casos de influenza en el salón” y el grupo de mamitas de whatsapp ardió “¿Sus hijos están bien? ¿Los van a mandar a clases? ¿Qué síntomas tienen?” La incertidumbre materna corría como reguero de pólvora.

Esta situación se vivió en varias escuelas de Mérida y por eso platicamos con el pediatra y maestro en Salud Pública David Canché Durán, quien nos contó que esta semana atendió a varios pacientitos con influenza.

Primero dejemos en claro qué es la influenza y el médico nos cuenta: “Es una enfermedad de las vidas respiratorias superiores que puede afectar en un 30% las vías respiratorias inferiores y puede causar neumonía o neumotis, provocadas por los virus tipo A, B y C. Hay distintos tipos de influenza y la que abunda hoy día es la H1N5, más conocida como gripa común y esto se debe al cambio de clima que viene con las lluvias”, detalla el pediatra.

También señala que en Yucatán existen dos picos de influenza al año: el tradicional, entre abril y mayo y el que vivimos ahora –“Considerado brote atípico”, explica- por el cambio de clima de las lluvias.

Y aunque el maestro en Salud Pública asegura que la influenza H1N5 no puede mutar a una H1N1 (que es más peligrosa, como sabemos) porque las cepas son diferentes, es fundamental tomar las precauciones debidas.

“Es recomendable cuidar mucho a los niños, sobre todo a los menores de cinco años porque esta influenza puede causar bronconeumonías. Es tratable, claro, pero molesta para al paciente con rinitis, inflamación de párpados, tos y laringotraequitis. No es una influenza peligrosas pero sí de fácil contagio y puede causar epidemia”, remarca Canché Durán.

Para el pediatra también es importante vacunar a los niños contra la influenza y los papás deben perder el miedo a los efectos secundarios de la vacuna, entre ellos fiebre, tos o mocos.

“La vacuna sí los protege contra la influenza pero tampoco te protege para toda la vida porque el viro es gestacional y muta. Por eso hay que vacunar cada año con la cepa nueva”, aclara.

Con respecto a la influenza H1N1, el pediatra explica que el brote puede ser aleatorio pero sobre todo se da en la época invernal y no es nativo de México, así que se puede “importar”.

“Las medidas para cuidarse contra la influenza es evitar salir de tu casa si estás enfermo y si debes hacerlo porque trabajas, usa cubrebocas de la marca “N95”, son los mejores porque son de uso industrial y los filtros son más pequeñitos”, detalla.

El período de contagio de la influenza es de tres días, sin embargo el virus se excreta a través del moco por eso es fundamental un excelente aseo de manos (recomienda no usar gel antibacterial porque la influenza es viral, no bacterial), no compartir utensilios ni elementos de aseo y consultar al médico.

“En los consultorios de las farmacias muchas veces les recetan antibióticos a los pacientes ante una infuenza H1N5 y no son necesarios ya que esta enfermedad es viral, no bacteriana. Es fundamental que lleven sus hijos a su pediatra y que no se automediquen”, indica.

Y en este puente de Fiesta Patria que se viene, el maestro en Salud Pública también recomienda cuidarse de los espacios públicos para evitar contagios.- CGO.