Nuestro bordado yucateco, motor que sensibiliza a niñas y niños en Yotholín
¿Qué las niñas sólo deben aprender a bordar? ¡Claro que no! … Desde Yotholín, comisaría de Ticul, Niñas y niños de cuarto grado levantan la mano para decirnos “Aquí estamos” y nos muestran cómo bordan hilo contado de manera maravillosa y también trabajan el huano y disfrutan de los juegos tradicionales. Todo desde la escuelita pública Felipe Carrillo Puerto, pasen y lean las maravillas que hacen nenés, docentes y comunidad:
Además de seguir los programas de la Secretaría de Educación Pública (SEP), en la escuelita pública Primaria Felipe Carrillo Puerto de Yotholín, en Ticul, deciden ir más allá, dar un salto grande, aportar para enriquecer, escuchar a las niñas y niños, visibilizar sus necesidades para así sensibilizar a la comunidad en general.
Y orgullosas y orgullosos de la chamba que arrancaron en febrero pasado, comparten con Sumario Yucatán el proyecto de “Aprendizaje Situado” que realizan en esta escuelita, donde asisten 350 estudiantes. Como parte de la metodología del Proyecto CARE (basado en C de conciencia, A de acción, R de reflexión y E de evolución), este programa de la Universidad Veracruzana se aplica en esta primaria de Yotholin para focalizar en las necesidades de los niños y contribuir a un bienestar social, ecológico y más humano.
Por eso, la directora Rosy Fajardo nos comparte que los docentes de los dos cuartos (A y B) de la Felipe Carrillo Puerto decidieron poner el ojo y la acción en el bordado de hilo contado (punto de cruz) en primera instancia y para abarcar tanto a las niñas como a los niños de cuarto grado, para sensibilizarlos y que ellos hagan sus propios bordados.
Aunque sentían curiosidad, al principio hubo resistencia porque consideraban que el bordado es cosa de niñas o mujeres, mamás, hermanas, tías y abuelas. Sin embargo y gracias a la labor amorosa y constante de los docentes de cuarto Luis Vidal Contreras (grupo A) y Lorena Alejos Guerrero (grupo B), lograron romper barreras, sensibilizarlos y enseñarles sobre todo que la labor del bordado no tiene género, que es un arte ancestral que hoy sigue vivo y que además, significa un emprendimiento.
Y se hizo la magia… Los chicas y chicos encantados de la vida comenzaron a bordar y familias de la comunidad los acompañan hoy día en este aprendizaje maravilloso.
También están aprendiendo a hacer objetos y artesanías de huano y están súper motivados con el proceso y lo que pueden lograr con su creatividad a flor de piel.
Los docentes Luis y Lorena nos comparten también que los juegos tradicionales fueron otra actividad que integraron a este programa de aprendizaje y que es un éxito entre los chicos quienes, además de entretenerse, están alejados un rato de la tecnología. Para seguir trabajando en equipo, se han sumado al proyecto la docente de educación física Martha Gómez y la maestra de artes Guadalupe Navarrete.
Así se labora con cerebro, corazón y alma en esta escuelita en Yotholín, pensando de forma integral en los estudiantes y la comunidad donde habitan. Y este programa ha logrado con éxito involucrar a todas y todos. Los docentes y la directora nos comparten que, en junio próximo, harán una presentación con los logros y resultados de los estudiantes y estamos todos invitados para vivirlo en carne propia. Gracias Yotholín por levantar las manos y enseñarnos que sí se puede.- Cecilia García Olivieri.