“Me siento feliz y mis hijos dicen que me veo radiante”
Con una sonrisa carmín y unos ojos llenos de brillitos, hoy conocimos a Felicitas García García, una chelemeña de 42 años que se convirtió en la primera paciente de la Clínica de Cirugía Bariátrica del HRAEPY. Después de la intervención en la que le redujeron el estómago, Felicitas bajó ya más de 10 kilos y la vida le cambió para siempre. En este espacio de salud la atención es multidisciplinaria y gratuita para quienes no tengan derechohabiencia, entérate:
Toda de blanco, con un vestido hermoso que le deja a la vista unos hombros bronceados parejos de sol de playa, Felicitas García García viste además una sonrisa de oreja a oreja y le brillan los ojitos. Como dicen sus hijos: “Mamá, te ves radiante”, y no se equivocan…
Esta mujer de 42 años oriunda de Chelem ya perdió más de 10 kilos en un mes luego de una cirugía bariátrica en el Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán (HRAEPY) y fue la primera paciente de la Clínica de Bariatría que hoy se inauguró en la institución de salud y que brinda atención integral gratuita a las y los pacientes sin seguro médico que requieran una disminución de su estómago para dejar la obesidad a un lado y tener una mejor calidad de vida.
Felicitas pesaba 111 kilos en 1,57 de altura. Le costaba caminar, le dolían las piernas y todo el cuerpo y vivía agitada. “Cuando tienes sobrepeso te vuelves lenta, te pesa todo y te cuesta respirar cuando te mueves”, relata, como en un mal recuerdo.
Hace un mes fue valorada en el HRAEPY y fue una candidata perfecta para la cirugía bariátrica –en la que te reducen el tamaño del estómago-, que implicó en su cuerpo cuatro cortes pequeños en la barriga (es por laparoscopía) y una rápida recuperación.
“El primer día luego de la cirugía tuve molestias y dolor en el estómago porque el cambio en tu cuerpo es total. A partir de ahí y por la reducción de mi estómago, ya como mucho menos, no me dan ganas de ingerir lo de antes porque mi cuerpo ya no lo acepta”, relata.
A un mes de la cirugía, Felicitas pesa 99 kilos, se la ve divina, segura de sí misma y con la mirada llena de brillo. “Recibí atención psicológica antes de la cirugía y ahora me atiendo con una nutrióloga. La semana que viene comenzaré a ir al gimnasio”, cuenta, decidida.
Y aunque ahora considera que su salud emocional está muy bien y no requiere atención psicológica, parte del cambio se la debe a la intervención quirúrgica. “Lo primero que bajó fue mi barriga y el cambio fue notorio. Además, me arreglo más que antes, me siento feliz, mis seres queridos me dicen que me veo muy bien y mis hijos dicen que estoy radiante”, dice, feliz.
Felicitas es una mujer muy activa… Y ahora más. “Trabajo impermeabilizando y pintando casas y me encanta andar en bici. Ahora más que nunca me subo y voy de Chelem a Chuburná rodando”, detalla.
DETALLES DE LA CLÍNICA DE BARIATRÍA
La médica especialista Daysi Zenteno es la cirujana líder de la Clínica de Cirugía Batriátrica y fue quien operó a Felicitas. Hoy, la doctora nos cuenta que esta es la primera clínica de este tipo en el Sureste y que el equipo multidisciplinario que la compone está integrada por un médico internista, nutriólogo, psicólogo y psquiatra, anestesiólogo y cirujano bariatra. “La finalidad es tener una preparación preoperatoria (de un mes) para que el paciente entre en las mejores condiciones al quirófano y para poder optar por la mejor alternativa quirúrgica según cada caso. Luego de la cirugía continuará la atención para el seguimiento, que puede ser de uno a cinco años”, detalla.
Daysi también explica que Yucatán era hace dos años el primer lugar nacional en casos de obesidad y hoy es el cuarto. “Esto no significa que estemos ahora en este lugar porque se atienda la obesidad, sino porque otros estados tuvieron más casos”, relata. En obesidad infantil, México está lamentablemente en primer lugar a nivel mundial.
La pregunté a la especialista quiénes son candidatos a esta cirugía: “La edad es a partir de los 16 años y atendemos a pacientes con un índice de masa corporal arriba de 30, con o sin comorbilidades”, explica.
Para Daysi la evaluación psicológica o psiquíatrica es fundamental porque las emociones están muy asociadas a la obesidad. “Por eso deben ser tratados los pacientes antes de la cirugía y si es necesario también después”, señala.
Con la inauguración de la clínica y el primer caso de éxito de Felicitas, la médica Daysi explica que esperan operar dos o tres pacientes por semana. “Todas las personas que no sean derechohabientes pueden venir al hospital de lunes a viernes de 8 am a 12 pm para solicitar una valoración en cirugía bariátrica”, invita.
Por su parte, el médico Jorge Guillermo Herrera, director de Planeación, Enseñanza e Investigación, comparte que esta cirugía cuesta en un lugar privado entre 180 mil y 200 mil pesos. “Como necesitas dos años de tratamiento después de la intervención por los cambios en el metabolismo y para dar seguimiento al caso, el costo total sería como de un millón de pesos”, remarca.- Cecilia García Olivieri.