La conversación
Columna Butaca Alta
Por Roberto Acevedo Acosta
A últimas fechas ha surgido en los Estados Unidos un debate sobre quién es el deportista más importante en la historia de todos los deportes que se practican a nivel profesional en ese país.
Popularmente a ese título se le conoce como G.O.A.T ( Greatest Of All Time), expresión que muchos aficionados representan con una cabra, que es como se traduce literalmente del inglés al español la palabra goat. Pero en realidad la traducción que hace referencia al término deportivos es: el más grande de todos los tiempos.
En ésta conversación están nombres de grandes deportistas norteamericanos, pero destacan dos en particular: Michael Jordan y Tom Brady.
Lo que hicieron cada uno de ellos en sus respectivos deportes ( Basquetbol y Fútbol Americano) difícilmente se volverá a repetir.
Para muchos Michael Jordan llevó al básquetbol a otro nivel con sus seis títulos de la NBA con los Chicago Bulls.
En su momento, Jordan fue tan dominante que se dio el lujo de retirarse de las duelas, después de ganar tres títulos en forma consecutiva para probar suerte en el béisbol profesional, donde no le fue nada bien, para después de dos años de ausencia regresar y ganar otros tres campeonatos, otra vez de forma consecutiva.
Pero la grandeza de Jordan no sólo fue en la canchas, sino afuera donde logró que su nombre se transformara en un ícono de la cultura norteamericana al crear una línea de calzado que hasta hoy es un símbolo de moda y status, principalmente en la comunidad afroamericana.
Usar unos tenis Jordan es símbolo de que estas al último grito de la moda.
Michael Jordan logró ser la imagen de muchas campañas publicitarias de las marcas mas importantes de los Estados Unidos, lo que le generó grandes ganancias económicas.
La mercadotecnia que se generó alrededor de Jordan fue tan grande e impactante que le representó al jugador una fortuna que al día de hoy se estima en 1.6 billones de dólares, lo que le permitió adquirir al equipo profesional de la NBA (Charlotte Hornets).
Muchos consideran que LeBron James, quien sigue en activo, es lo más cercano a Michael Jordan en cuanto legado e impacto en el mundo del básquetbol, pero el hecho de perder finales de la NBA lo pone un escalón por debajo de la figura de los Toros que nunca perdió una. Esto a pesar de que James tiene el récord de 8 finales consecutivas, de un total de 9, pero de las cuales sólo ha ganado 4.
A esto súmele que Jordan jugó “solo” 17 años, en dos equipos: Chicago (14 años) y Washington (3 años) , y se retiró a los 40 años con muchos récords aún vigentes en el mundo del básquetbol de la NBA.
Con estos antecedentes nadie pondría en duda el título de GOAT para Jordan, sin embargo para ésta conversación el único que es capaz de competirle es el actual jugador de los Bucaneros de Tampa Bay, Tom Brady, quien a sus 44 años cada vez que sale a jugar en esta temporada rompe récords en la NFL.
La historia de Brady es digna de una película porque además de ser el mariscal de campo más longevo en la historia del fútbol americano con 21 años y contando, tiene en su haber 7 Súper Tazones. Seis con los Patriotas de Nueva Inglaterra y uno con los Bucaneros.
Brady tiene muchos récords en la NFL siendo los más relevantes el de más pases de anotación con 600 y el de más yardas obtenidas con más 80,000. Todos sus números son impresionantes y más si uno considera que cada vez que salta al terreno de juego los puede incrementar, habrá que esperar a que termine su carrera para ver hasta dónde llegó su legado.
A diferencia de Jordan, Tom Brady no tiene toda la mercadotecnia que existe detrás del ex jugador de básquetbol, pero el hecho de seguir activo -en un estado físico envidiable y ganador- lo hace tener el reconocimiento de la gente por cómo a llevado su carrera profesional y eso lo pone en la conversación.
Al final si vemos el legado económico deportivo pues muchos dirán que el GOAT es Jordan, pero si nos vamos a solamente lo deportivo probablemente dirán que Brady por su longevidad. Creo que la decisión pasa por los gustos de cada quien, lo que es una realidad es que los dos son deportistas extraordinarios y que pasará mucho tiempo para ver que alguien haga lo que ellos dos hicieron. Tal vez aún no ha nacido el deportista que en su momento romperá sus marcas.