Hace cuatro años, toda su anatomía entraba afilada al agua de las piscinas olímpicas de Tokyo 2020. La sensación era sin duda agridulce porque, para el clavadista yucateco Rommel Pacheco, era el punto final de su carrera que tanto le enseñó en la vida: a ser disciplinado, resiliente, a volver a intentarlo una y otra vez y a ganar 38 medallas para él y para México.

Hoy Rommel desde los Juegos Olímpicos de París 2024, celebra con el corazón despanzurrado, a pura emoción y como un hermano mayor, el triunfo de Osmar Olvera, su compatriota que hoy ganó medalla de bronce en trampolín de tres metros y, hace días y junto a Juan Celaya, medalla de plata en la competencia de sincronizados.

Desde la Ciudad de las Luces, Rommel nos comparte este vídeo, que habla de su orgullo por los logros de los atletas mexicanos, de lo bien que hace el deporte y, sobre todo, de “activarlo en nuestro estado, en los municipios y en el país”.

Gracias Rommel por la buena onda y ojalá avancemos cada vez más en todas las disciplinas para ser orgullosos referentes nacionales e internacionales.- CGO.