“El camino del progreso no siempre es una línea recta”
“Prorrogar lo improrrogable”, esa podría ser una definición de cómo quedó el acuerdo final de la Cumbre Climática COP26, que se realizó en Glascow, Escocia y terminó recién ayer, un día después de lo previsto. No se expresaron finalmente acciones concretas e inmediatas contra el cambio climático y los compromisos son laxos y a largo plazo. Entérate:
Tras prolongar un día más las negociaciones en la Cumbre Climática “COP26”, los casi 200 países reunidos en Glasgow (Escocia) adoptaron ayer un documento final que, según Secretario General de la ONU, refleja los intereses, las contradicciones y el estado de la voluntad política en el mundo actual.
“Es un paso importante pero no es suficiente. Debemos acelerar la acción climática para mantener vivo el objetivo de limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 grados”, dijo António Guterres en una declaración en vídeo publicada al término de la reunión de dos semanas.
El titular de la ONU añadió que es hora de pasar al “modo de emergencia”, poniendo fin a las subvenciones a los combustibles fósiles, eliminando el carbón, poniendo un precio al carbono, protegiendo a las comunidades vulnerables y cumpliendo el compromiso de 100,000 millones de dólares de financiación para el clima.
Guterres también tenía un mensaje para los jóvenes, las comunidades indígenas, las mujeres líderes y todos aquellos que lideran la acción climática. “Sé que están decepcionados. Pero el camino del progreso no siempre es una línea recta. A veces hay desvíos. A veces hay zanjas. Pero sé que podemos conseguirlo. Estamos en la lucha de nuestras vidas, y esta lucha debe ganarse. Nunca se rindan. Nunca retrocedan. Sigan empujando hacia adelante”.
EL VASO MEDIO LLENO
Durante la conferencia se hicieron algunos anuncios alentadores:
?Uno de los más importantes fue que los líderes de más de 120 países, que representan alrededor del 90% de los bosques del mundo, se comprometieron a detener e invertir la deforestación para 2030.
?También hubo un compromiso sobre el metano, liderado por Estados Unidos y la Unión Europea, por el que más de 100 países acordaron reducir las emisiones de este gas de efecto invernadero para 2030.
?Por otra parte, más de 40 países -entre ellos grandes consumidores de carbón como Polonia, Vietnam y Chile- acordaron abandonar el carbón, uno de los mayores generadores de emisiones de CO2.
?El sector privado también mostró un fuerte compromiso con casi 500 empresas de servicios financieros mundiales que acordaron alinear 130 billones de dólares -alrededor del 40% de los activos financieros del mundo- con los objetivos establecidos en el Acuerdo de París, incluyendo la limitación del calentamiento global a 1,5 grados Celsius.
?Además, algo que tomó por sorpresa a muchos, Estados Unidos y China se comprometieron a impulsar la cooperación climática durante la próxima década.
?En cuanto al transporte ecológico, más de 100 gobiernos nacionales, ciudades, estados y grandes empresas firmaron la Declaración de Glasgow sobre coches y furgonetas con cero emisiones para poner fin a la venta de motores de combustión interna para 2035 en los principales mercados del mundo en 2040.
?Al menos 13 países se comprometieron también a poner fin a la venta de vehículos pesados impulsados por combustibles fósiles para 2040.
?En las últimas dos semanas se han realizado muchos compromisos “más pequeños”, pero igualmente inspiradores, como el de 11 países que han creado la Alianza Más allá del Petróleo y el Gas (BOGA). Irlanda, Francia, Dinamarca y Costa Rica, entre otros, así como algunos gobiernos subnacionales, lanzaron esta alianza, la primera de su tipo, para fijar una fecha de finalización de la exploración y extracción de petróleo y gas a nivel nacional.