Día de la Niñez: La responsabilidad de criar con respeto y amor que salven
Columna Domingo Sudaca
Por @LaFlacaDelAmor
Hoy no veo el vaso medio lleno. Celebramos a la niñez en su día y siento que es buen momento para parar la pelota, sentarse en la tribuna, mirar nuestro a entorno y reflexionar.
¿Están bien tus hijos? ¿Tus sobrinos, tus nietos, los hijos de tus mejores amigos? La salud mental –esa hermanita no reconocida de la salud pública, no me canso de repetirlo- TAMBIÉN afecta a nuestros chicos. En un mundo adultocentrista, donde muchos voltean a ver a las infancias por mera corrección política, las niñas y niños no siempre la pasan bien. No están bien.
La pandemia nos dio en la torre a todos, pero los más chicos la sufrieron y todavía la padecen. En una edad en la que no tienes acceso a un celular para conectarte con el mundo, durante el encierro de la pandemia tomaron clases en línea, jugaron solos, escucharon y fueron partícipes de peleas familiares, vivieron violencias, ausencias, carencias y no pudieron pedir ayuda ¿A quién?
A la fecha, el rezago educativo y emocional les pega fuerte. Porque la pandemia se fue, pero el aluvión de cosas que nos dejó no hay cómo pararlas. Y nuestras infancias -resilientes, blancas, con ganas de salir adelante- le ponen el pecho siempre, como pueden. Y muchas veces los rodea la soledad, aunque estén en compañía.
Si eres mamá o papá sabes que, los chicos de primaria, tienen graves problemas hoy día para sociabilizar en la escuela. El bullying está a la orden del día y a los adultos docentes, mamás y papás nos faltan muchísimas herramientas para manejar estas situaciones. Porque, además, nos cuesta mucho corrernos de nuestro espacio adultrocentrista, nos da trabajo hacer escucha activa, entender qué necesitan nuestros chicos.
En la encuesta del programa “Juventudes de Yucatán” del Gobierno del Estado, saltó un dato escalofriante: solo el 24% de nuestros adolescentes sienten confianza en hablar con mamá y papá cuando se sienten estresados o ansiosos.
¿Y los más chicos cómo están? Porque cuando eres niña o niño también te estresas y también transitas ansiedad, angustia, pánico y muchas cosas más que afectan nuestra salud mental. Entendamos que EL CUIDADO EMOCIONAL ES CLAVE PARA NUESTROS CHICOS.
Y si es difícil para los nenés que viven dentro de la “normalidad” que impone la sociedad ¿Cómo están las y los chicos con condiciones como autismo, síndrome de down, discapacidades motoras, enfermedades crónicas, cáncer, carencias económicas? La salud mental de ellas y ellos debería ser prioritaria para que superen cualquier obstáculo.
No, hoy no veo el vaso medio lleno y me cuesta mucho llenarlo. No siento tampoco que tenga una mirada fatalista de la situación, pero sí creo que vivimos una realidad que nos escupe en la cara que nuestros nenés no están del todo bien y que nosotras y nosotros que somos grandes no estamos actuando con todo para ayudarles.
Los chicos son los seres más inocentes del mundo, miran y nos miran con una curiosidad plena, quieren aprehender todo, dan amor incondicional y se merecen por eso y mucho más lo mejor. Porque como los criemos y tratemos ahora será como ellas y ellos sean cuando se conviertan en adultos. Los hijos no son bendiciones, son responsabilidades que nosotras y nosotros como adultos tenemos a cargo.
Celebrémoslos hoy y todos los días. Hagamos escucha activa con ellos, abracémoslos mucho, contengámoslos, acompañémoslos, sostengámoslos, dejémoslos ser, confiemos en ellas y ellos, aplaudamos sus triunfos y motivémoslos cuando se sientan fracasados. Y criémoslos con independencia, respeto y muchísimo amor, porque el amor salva.
Feliz día, nenés, hoy y siempre. Por siempre.