“Confíen en nosotras, estamos para apoyar y servir”
Aunque sólo el 15% del personal son mujeres, hoy sus voces se escucharon fuertes, claras y comprometidas en el aniversario 20° de la Policía Municipal de Mérida, institución con una amplia aprobación de la ciudadanía, en contraste a lo que ocurre en otras partes del país. Tres mujeres policías nos comparten cómo es su chamba diaria, en un día de celebración y reconocimientos
Me las encontré justo cuando se iban a tomar una selfie. Las tres visten igual, llevan el cabello recogido y están impecables. Y no es para menos: estas tres mujeres festejan hoy los 20 años de la Policía Municipal de Mérida, lugar donde trabajan desde hace uno, 11 y 12 años, respectivamente.
Hoy, el Ayuntamiento de Mérida celebró a más de 400 efectivos y administrativos de la institución, que volvió a operar en 2003 -después de más de tres décadas de ausencia- con 81 elementos y bajo la presidencia municipal de Ana Rosa Payán, hoy presente en el evento.
El alcalde Renán Barrera Concha presidió hoy un desayuno con los trabajadores de la Policía, en el que se entregaron reconocimientos por trayectoria y se anunciaron ascensos de cargos. El presidente municipal explicó que, según datos de la última Encuesta de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del primer trimestre del 2023, la Policía Municipal cuenta con un 75.8 % percepción de seguridad, en contraste con la media del 62.1% el país.
“Otros datos relevantes es que el 65.4% de nuestra población considera efectivo su desempeño y el 66 % de las y los meridanos considera a esta autoridad como una institución pública que inspira confianza”, detalló.
Pero volvamos a las mujeres policías, que, aunque visten igual, son distintas. Ana Torres tiene 22 años y hace uno que es Policía Municipal. Desempeña su trabajo en las calles de Mérida. Érica Rejón tiene 47 años, hace 11 que es policía y trabaja ahora (ya pasó por otras áreas) en vialidad, en el DIF Municipal. Irma Mexicano tiene 52 años, hace 11 que es policía y cumple labores en la Unidad de Víctimas de la Institución meridana.
Y aunque son diferentes, hay algo que las une y se resume en algunas palabras que las tres repiten en cada plática: “Generar confianza”, “Experiencia” y “Capacitación”.
SER POLICÍA
Para Irma, la más grande y experimentada de este grupo de tres, ser policía significó en su vida sacrificar parte de su rol de mamá. “Tenemos horarios muy variados y es complicado organizar la vida familiar cuando tienes hijos. Sin embargo no es imposible y todo es más llevadero si te gusta el trabajo que haces”, afirma.
Érica, también mamá, coincide con Irma y agrega: “Cuando te gusta lo que haces, te identificas con el trabajo totalmente y otra cosa maravillosa es que ningún día es igual a otro, siempre pasa algo distinto”.
Ana no es mamá, pero coincide con sus compañeras en el sacrificio que implica el trabajo respecto a la vida familiar. “Pero vale la pena porque estamos ayudando a la gente”, señala.
¿Cómo es tratar todos los días con la gente y en situaciones diferentes? Les pregunto. Para Irma su chamba en la Unidad de Atención a Víctimas no es nada fácil. “Causa tristeza y coraje cuando ves a niñas o niños víctimas de abusos sexuales o abandonos. Son situaciones difíciles de vivir, sobre todo cuando ves que los generadores de violencias son muchas veces los propios padres de familia. Sin embargo, nuestro trabajo está ante todo y hacemos acompañamiento y equipo con Prodennay y todo fluye”, explica.
Érica analiza el vínculo que genera la policía con las personas que debe tratar diariamente. “Entramos en acción en situaciones en que las personas se sienten solas o vulnerables y lo primordial es ganarnos su confianza y hacerles sentir que lo que les está ocurriendo se puede solucionar. La confianza debe estar ante todo”, remarca.
Ana trabaja en la calle y para ella es difícil su labor cuando tiene que tratar con personas que padecen de sus facultades mentales. “A veces se vuelven violentas o agresivas, pero afortunadamente estamos capacitadas para atender estas situaciones y sabemos cómo canalizarlos”, detalla.
¿Qué necesitan para hacer mejor su trabajo? Les pregunto.
Irma cree que la capacitación es clave y debe ser constante. “Afortunadamente aquí me dieron la oportunidad de estudiar Psicología y sigo preparándome profesionalmente”, dice.
Para Érica la intervención en el momento preciso es primordial para hacer bien su trabajo y considera que eso se logra con experiencia y también con capacitación. “Eso nos permite hacer mejor nuestra labor”, explica.
Anita es la más joven de las tres y cree que para hacer mejor su trabajo necesita adquirir día a día más experiencia. “Sigo aprendiendo todo el tiempo”, remarca.
Las tres se despiden con un mensaje a las y los meridanos que repiten casi exacto: “Confíen en nosotras, estamos para apoyar y servir”.
Algnos datos interesantes sobre la institución hoy:
🚨 En este último año iniciaron formación 40 cadetes de policía y se instaló en Mérida el Consejo Municipal de Seguridad Pública y Prevención Social del Delito.
🚨 Los agentes reciben diversas capacitaciones como en derechos Humanos y lenguaje de señas, entre otros.
🚨 Se puso en marcha el programa “Policía Educativa en tu Comunidad”.
🚨 Se invirtió en equipamiento: 60 cámaras de solapa, 40 cámaras para patrulla, 60 radios portátiles, 1 equipo repetidor y 1 radio móvil. Así como se procedió la presentación de un dron que está al servicio de corporación, con una inversión total de un millón 408 mil 254 pesos.- Cecilia García Olivieri.