Abigail Valdéz, oro en el arte de tocar sin ser tocado
Se define como una guerrera y el adjetivo le viene como anillo al dedo. Ella es Abigail Valdéz, esgrimista yucateca y seleccionada nacional, quien acaba de ganar oro para Yucatán en la Olimpiada Nacional Juvenil. Conozcan a esta maestra del sable en su camino a Tokyo 2020
Como una alquimista, Abigail Valdéz conoce la medida exacta para mezclar arte y deporte. Segura, precisa y con la cabeza fría, esta yucateca sabe mucho del “Arte de tocar sin ser tocado” y así lo demostró con una medalla de oro que ganó recientemente para Yucatán en esgrima, en las Olimpíadas Nacional y Nacional Juvenil, en Chetumal.
Con 18 años, esta meridana –maestra del sable- trae mucho amor y garra por la esgrima y eso hace que, cada vez que suba a la pista, deje el cuerpo, la mente y sobre todo el corazón para dar lo mejor de sí misma y ese esfuerzo se traduce en oro. Sumario Yucatán platicó con Abigail –seleccionada nacional- quien nos cuenta sobre este arte-deporte y nos habla también de sus sueños. Conózcanla:
Defínete en pocas palabras, como un tweet
Guerrera.
¿Jugabas de niña a luchas con espadas?
No, pero siempre fui una persona que combate ante todo y muy competitiva, siempre me gustaba ganar y competía mucho con mis dos hermanos mayores. Desde pequeña hice natación y pentatlón y al final me decidí por la esgrima.
¿Qué es la esgrima?
Es el arte de tocar sin ser tocado. Es un deporte muy elegante y de mucha concentración que se practica con tres armas diferentes –sable, espada y florete- y cada competencia se divide en tablas o poules y eliminatorias directas. Una competencia puede durar entre dos y tres horas.
¿Cómo empezaste en este mundo de la esgrima?
Tenía ocho años cuando, luego de practicar pentatlón, me decidí por esgrima. Me gustó por el combate y por el sentimiento de triunfo que me dejaba, además de que me hacía muy feliz. Yo daba todo, ganaba todo y eso era todo para mí. De entrada ya arranqué con medalla.
Dedicarse a la esgrima en México ¿Es o no es una excentricidad? ¿Por qué?
Es excéntrico porque no es un deporte tan conocido. Sin embargo, cuando entras en contacto con la esgrima y lo entiendes como deporte, tienes otra perspectiva. Es un deporte caro, pero se puede practicar a nivel estatal y federal.
¿Qué sientes cuando practicas esgrima?
Me gusta sentir una especie de dolor que surge del esfuerzo que hago. Cuando subo a la pista y lo doy todo, ese dolor se convierte en medalla y me gusta mucho. La esgrima es un deporte muy integral, lo haces con todo el cuerpo y necesitas de mucha concentración porque por un error se te puede ir una competencia. Sin embargo eso es aprendizaje, una medalla y una próxima competencia siempre.
¿Cómo ves a tu oponente?
Como una persona normal y nunca me confío. Pienso que me puede ganar, pero también tengo mi confianza de triunfo.
¿Cómo es un día de entrenamiento? ¿Cuánto hay de sacrificio y cuánto de placer?
Me levanto, desayuno y 7.30 am empiezo a entrenar en la Unidad Deportiva Benito Juárez, en Mérida. 9:30 am me voy a casa, almuerzo, estudio (está en el último año de preparatoria) y regreso a entrenar de 4 a 7:30 pm. Luego a cenar y descansar hasta el otro día. Los viernes descanso, me gusta ver películas y comer con mis papás. El sacrificio es el esfuerzo mío y de mi familia para hacer este deporte.
¿Cuál es tu arma preferida y por qué?
Es el sable, porque es bastante rápido y te permite en cualquier momento remontar o darle la vuelta al marcador.
¿A qué esgrimista admiras?
A la ucraniana Olga Kharlan, para mí es la mejor sablista y aunque ha estado muy sola por falta de equipo, logró ser medallista olímpica.
¿Es discriminatorio este deporte para mujeres?
No, para nada, es equitativo. Tenemos tantas oportunidades como los hombres y creo que en este momento en México las mujeres han destacado más, ya que hemos logrado como selección nacional un histórico tercer lugar mundial.
¿Qué se viene para Abigail la esgrimista?
Terminada la Olimpiada Nacional, me voy al Panamericano Senior en Canadá. Luego arranca la clasificación para las Olimpíadas Tokyo 2020. En mi vida personal, el año que viene espero comenzar a estudiar odontología.
Dale un mensaje a los chavos que quieran practicar esgrima
Que no le tengan miedo a las armas porque no les hacen nada. La esgrima es un deporte muy bonito y cuando lo conozcan lo van a amar.- Cecilia García Olivieri.