“No puedes borrar un problema de Salud Pública en medio de una pandemia”
La Ley Seca vigente desde hoy en Yucatán hace ruido y mucho. El Gobierno del Estado la decretó como medida para evitar la violencia intrafamiliar en la cuarentena que vivimos por el coronavirus, pero no todos opinan si es mejor “el remedio que la enfermedad”. Aquí dos puntos de vista, médico y social y cultural, no te los pierdas
La noticia corrió como reguero de pólvora e hizo llama. Desde hoy el Gobierno del Estado decretó Ley Seca en Yucatán. No se pueden vender ningún tipo de bebidas alcohólicas y el decreto 208/2020 explica que es una medida para evitar la violencia doméstica, debido al aislamiento social por la pandemia del coronavirus. Sin embargo no todos están de acuerdo y lo demuestran con fundamentos.
Hoy, en plática con el médico y maestro en Salud Pública David Canché Durán, nos contaba que recibió dos pacientes recientemente con cuadro de abstinencia alcohólica. “Uno de los casos era un hombre de 53 años, acostumbrado a beber a diario. Vino con un cuadro de agitación importante y estos casos se van a multiplicar”, señala el médico.
Agitación, irritabilidad, insomnio, depresión, temblores, alucinaciones visuales, dolor de cabeza y convulsiones son algunos de los síntomas de la abstinencia alcohólica y del 5 al 8% de estos pacientes puede morir, detalla el doctor Canché Durán.
Otro punto de vista, más social y cultural, nos da Gina Villagómez, doctora en Antropología Social, investigadora y activista. Ayer ella manifestó en redes sociales su punto de vista sobre la Ley Seca y hoy la entrevistamos para que nos brinde detalles. Es muy interesante lo que nos cuenta. Entérate:
La violencia intrafamiliar aumentó durante la cuarentena en Yucatán
Es así y en todo el mundo. Y se habla mucho de la violencia contra las mujeres, pero se minimiza la violencia contra los niños y hay que tenerlo muy pendiente. Es un hecho que se ha elevado porque la misma situación de pandemia nos tiene en el encierro, sin recursos y se genera mucho estrés. Y algo que no se ha analizado es que la cuarentena trajo una “reorganización doméstica”. El padre o madre que antes salía a trabajar, los niños que iban a la escuela… Toda esa dinámica cambió. Esas modificaciones que se hacen tan drásticamente -con el agravante del miedo al contagio del coronavirus- generan relaciones de conflicto adentro del hogar que no están trabajadas porque son relaciones nuevas. Y por primera vez sin fecha de caducidad e incertidumbre, generan respuestas que pueden terminar en conflicto.
En las redes sociales opinaste sobre la Ley Seca que acaba de promulgar el Gobierno del Estado. Danos detalles de lo que opinas
Si bien es cierto que el alcohol es un detonante de la violencia doméstica en la vida cotidiana, no es el origen de la violencia. Aunque hay mujeres alcohólicas, es un detonante de una cultura patriarcal y misógina de los hombres desde que son socializados y las prácticas de alcoholismo en situación de encierro se agravan. Ahora bien ¿Qué sucede con una Ley Seca? Desde mi punto de vista y por las experiencias que tengo con mujeres víctimas de violencia, si el alcohol agrava la violencia, cuando hay situaciones de abstinencia los hombres se vuelven más violentos.
¿De qué forma?
Dos cosas: si deja de beber alcohol, puede comenzar a consumir otro fármacos o drogas. Y el síndrome de abstinencia de hombres que intentan dejar la bebida les genera aún más ansiedad. Se vuelven más agresivos cuando viven en abstinencia que cuando finalmente se emborrachan.
¿Cuál es para ti el riesgo de la Ley Seca?
Es el tiempo: no es lo mismo una Ley Seca de 72 horas por un proceso electoral que una sin fecha de caducidad. Porque sabemos que el decreto dice que es hasta el 30 de abril, pero también estamos informados por las curvas de la epidemia que esto se puede extender hasta junio. Considero que se tomó una decisión riesgosa y apresurada sobre algo que no se van a poder echar atrás y tampoco saben cuánto tiempo se puede extender. El riesgo de la abstinencia comienza a las 72 horas del no consumo y ahí se puede potenciar la violencia dentro del hogar.
¿Consideras que está todo el estado igual o en algunos lugares sería distinta esta situación?
Me preocupa mucho el Interior del Estado porque allí no hay cobertura de protección hacia las mujeres en contra de la violencia. No existen líneas telefónicas municipales, refugios, ministerios públicos, psicólogas que puedan socorrerlas inmediatamente. En Mérida está el Instituto de la Mujer y hay un refugio que ya está saturado, pero se planea ampliar a hoteles. Sin embargo, lo que pase con esas familias de los municipios de ahora en adelante ni siquiera nos vamos a enterar porque son poblaciones que ahora están “selladas” y ni siquiera pueden salir de allí. Esas mujeres y niños están abandonados en el encierro en sus comunidades y el Gobierno del Estado cierra las puertas al alcohol y no ha pensado cómo cerrar las puertas a esa violencia y los deja a su suerte.
¿Qué propuesta o alternativa te parece que podría existir para esta situación?
En lugar de hacer una Ley Seca, se podría implementar un horario de venta de alcohol determinado, no sé: de 11 am a 1 pm, para evitar que la gente beba hasta la noche. Somos un estado de alcohólicos y no se trata de promover el alcoholismo, pero tampoco puedes borrar un problema de salud pública en medio de una pandemia. Me parece muy peligroso.
¿Y los clandestinos?
Es un efecto inverso de la Ley Seca. Como buenos mexicanos nos las ingeniamos y esto va a generar que te vuelvas consumidor de otro tipo de enervantes o acudas a los clandestinos. A mí me preocupa mucho el Interior del Estado, donde hay cacicazgos conformados por políticos y empresarios de la región. Ellos tienen el control de la venta del alcohol y van a ser las mismas autoridades y empresarios los que van a hacer su agosto con los clandestinos, donde la gente va a pagar el triple de precio por sus misiles. Por eso lo del efecto inverso, claro.
¿Una recomendación que puedas dar?
Sin querer ser fatalista, creo que hay que reconsiderar que el alcohol en estos momentos no se puede promover, pero sí considerar que es una manera de escape y que con horarios de venta más restringidos la gente pueda consumir sin estar en la desesperación total. Es más riesgosa la Ley Seca sin fecha de caducidad a dejar fluir con horarios y restricciones, vigilancia y supervisión.
Las medidas en la contingencia que ha tomado hasta ahora el gobernador Mauricio Vila me parecen muy pertinentes, pero sí recomendaría que amplíe los servicios de atención a víctimas de violencia a través de la Secretaría de la Mujeres (Semujeres) en el Interior del Estado y que estén muy atentos a posibles casos en los municipios que se generen en los hogares por la falta de alcohol y el encierro, de los cuales sólo nos vamos a enterar lamentablemente si son verdaderos dramas. – Cecilia García Olivieri.
Entiendo se puede comprar alcohol por Internet y que te llegue a domicilio. De que manera podría afectar esto? Tanto positiva como negativamente
No sabía, vamos a averiguar. Gracias por el dato.
Muy cierto. Espero que e sr gobernador tome cartas en el asuto y pi3nse las cosas antes de actuar ta drasticamente con respecto a esta contingenciavque bis esta colmando la paciencia al estar encerrados y dejar as actividades que siempre se realizaban al rededor de cada persona. Es de vital importancia la salud. Pero no a ese precio