“Desencadenamos acciones que van a tardar mucho en restablecer las condiciones adecuadas”
Se habla mucho del cambio climático pero se dice poco del cambio de paradigma cultural para lograr salvar al mundo. Porque si esperamos efectos positivos a corto plazo, estamos equivocados. De eso y otras cosas nos platica el biólogo e investigador Daniel Pech, no te lo pierdas:
El Centro de Investigaciones Científicas de Yucatán (CICY) está de cumpleaños, llegó a los 40 y lo celebra chambeando. Y es que desde ayer se realizan conferencias y mesas de trabajo en las que investigadores y científicos locales y del país tratan temas de interés general y, sobre todo, buscan soluciones.
Y uno de los temas que preocupa y ocupa es el cambio climático. Por eso hoy Sumario Yucatán platicó con el biólogo Daniel Pech, investigador y director de la Unidad Campeche del Colegio de la Frontera Sur, quien nos pinta un panorama un tanto caótico a corto plazo, pero si el paradigma cultural cambia, las nuevas generaciones van a estar mejor. Conózcanlo:
¿Qué sucede hoy, a esta hora, con el problema del cambio climático?
La gran emisión de gases C2 de efecto invernadero que provienen de los procesos industriales ha desencadenado una serie de problemas sin solución a corto plazo. Para ser más claros: Si en estos momentos se detuvieran todas las emisiones de C2 de todas las industrias, no pasaría absolutamente nada.
¿Nada bueno, nada malo?
Ni bueno ni malo, no pasaría nada, seguiríamos como estamos.
¿Por qué?
Porque en realidad tardaríamos 300 años en que se restablezca el sistema como lo conocíamos antes del desarrollo industrial. Seguiríamos igual a como estamos ahora porque es un ciclo muy largo para que el C2, que proviene de las industrias, se reintegre a los ciclos bioquímicos, está latente, va a seguir ahí.
¿Qué hacemos, entonces?
Tenemos que pensar en lo que vamos a dejarles a las nuevas generaciones. Para nosotros no representará un cambio y si pensamos que será así, estamos siendo muy egoístas. Hay que pensar en los que vienen porque para las nuevas generaciones sí importa iniciar ahora.
¿En qué nos estamos equivocando para no conseguir un cambio positivo?
El gran tema del cambio climático que se aborda muy pocas veces es el cambio de paradigma cultural. De pasar a tener aquí -en el área maya- a una deidad del agua (“Chac”) a la que le rendían tributo y le pedían permiso, ahora todo se reduce a una botella de agua purificada que se compra en una cadena comercial. Ese paradigma nos ha pegado mucho desde hace como 20 años que empezamos a entrar en otros sistema de valores. Por eso, si pensamos que todo lo que vamos a hacer ahora tendrá un efecto inmediato que nos haga sentir bien, eso es imposible. Desencadenamos una serie de acciones que van a tardar mucho en restablecer las condiciones adecuadas de los ecosistemas.
¿Por dónde empezamos con el cambio positivo para las futuras generaciones?
Empezamos con acciones muy pequeñas que probablemente pensamos que no impactan, pero sí lo hacen. Las nuevas generaciones ya traen esa conciencia, ya saben que les estamos dejando ambientes que están muy golpeados y amenazados. Ellos ven cómo van a vivir los siguientes años y esa debe ser nuestra preocupación. Los pequeños cambios deben estar dirigidos a minimizar el uso de objetos que podemos desechar, la disminución del uso de productos industrializados, el uso sustentable del agua, entre otros.
¿Y en cuánto al petróleo?
El petróleo es complicado porque lo usamos todo el tiempo y nuestra economía depende de eso. Debemos ver a otras fuentes de energía (eólica, solar, marina, de fases salinas, entre otras) que no nos van a hacer tan efectivos en los cortos años, sin embargo lo tenemos que entender así porque es lo que viene con el cambio del paquete de cambios que se deben hacer.
Aquí en Yucatán hay comunidades indígenas que se quejan de las deforestaciones que se realizan en sus lugares de origen para construir parques solares ¿Qué opinas al respecto?
Hay que entender los dos lados. Son voces que se alzan para utilizar energías alternas y otras gritan por sus territorios. Hay que buscar cómo compatibilizar. Es necesario hablar directamente con la gente, mostrarles los beneficios y dárselos directamente a ellos. Lo que ha pasado es que los beneficios no impactan en las comunidades. Si esto ocurriera, lo aceptarían porque es bueno para el medio ambiente.- Cecilia García Olivieri.