El consumo de agua y un buen aseo, claves para evitar infecciones urinarias
Una de las consultas médicas más habituales en Yucatán cuando el calor arrecia, es la de las infecciones en las vías urinarias (IVU), que no respeta edad, clase social ni género. Por eso es importante prevenirlas y que no se transformen en casos severos. Aquí el doctor David Canché te cuenta cómo
Con la llegada del calor fuerte, la semana pasada Lupita regresó del Kínder con un poquito de fiebre, dolor en el bajo vientre y mucho ardor para orinar. Con tal sólo cinco años, resultó que padece una sistitis, que es un caso leve de infección en las vías urinarias (IVU) y que ocasionó que tuviera que faltar a la escuelita unos días y su mamá al trabajo para cuidarla.
Las IVU son muy comunes en Yucatán y no es tanto por el agua que consumimos sino por el agua que no consumimos. Si bebés, niños, adolescentes, adultos y personas de la tercera edad tomaran más agua y mantuvieran una higiene más profunda en las zonas urinarias, estos tipo de infecciones no se darían con tanta frecuencia en el estado, nos cuenta el doctor David Canché Durán, médico pediatra y maestro en Salud Pública.
Sumario Yucatán platicó con el galeno para que nos informe qué son las IVU, cúales son sus síntomas y cómo podemos prevenirlas. Aquí te contamos todo:
¿Qué es una infección en las vías urinarias?
Es un organismo patógeno que invade desde el riñón hasta la vejiga y la uretra y afecta todo el tracto urinario y en cualquiera de estos niveles. La más severa de las IVU se llama pielonefritis, que afecta directamente al riñón. La más común es la sistitis, que produce inflamación en la vejiga y la más frecuente y más moleta es la uretritis, o “caño de orina”, como se conoce en Yucatán.
¿Qué causa esta infección?
El patógeno o basilo más recurrente viene de la flora intestinal y se llama e. coli( (Escherichia coli) y se da más en las niñas y mujeres porque la uretra mide en ellas apenas tres centímetros. En los bebés, por ejemplo, el hecho de defecar y no cambiarles pronto el pañal o realizar una limpieza sólo con toallitas húmedas, puede producir una infección en forma ascendente que hace que la bacteria e. colis pueda llegar al vejiga para instalarse ahí. La pielonefritis es por vía hematógena y por una infección intestinal, por ejemplo, llega a través de la sangre al riñón.
¿Cuáles son los síntomas?
En el caso de la pielonefritis se presenta con fiebre muy alta, dolor en la espalda, náuseas y vómitos, tanto en grandes como en chicos. La sistitis y la uretritis provocan dolor en el bajo vientre y ardor al orinar. A veces la orina puede salir con sangre o material purulento.
¿Cómo estamos en Yucatán en cuanto a este padecimiento?
En épocas de mucho calor es una de las consultas médicas más habituales. Y no es por el agua que consumimos, sino por el hábito que no existe de beber agua cuando, en un ambiente con temperatura tan altas, perdemos de un litro a uno y medio por día por sudoración y exposición al sol. Cuando tomas agua se produce un flujo constante que limpia los riñones, la uretra y la vejiga para que no se acumulen organismos ni tengan tiempo de reproducirse. Los niños deben tomar un litro de agua por día y los adultos de dos a dos litros y medio por día.
Otro tema fundamental es la limpieza de los genitales. En el caso de los bebés, debe ser un aseo profundo y no sólo con toallitas húmedas. Es importante también que, en el caso de las niñas, no sea una limpieza de atrás hacia adelante, sino al revés porque sino queda todo acumulado en las zona urinaria. Los adultos también deben mantener una profunda limpieza de los genitales para evitar estas infecciones.
¿Porque las IVU son tan comunes en las mujeres embarazadas?
Se dan con más frecuencia en el embarazo porque hay compresión de la vejiga, que se hace más pequeña y queda detrás del útero. Al quedar orina “atrapada”, se puede producir la bacteria e. coli.
¿Cómo las prevenimos, entonces?
Hay que tomar mucha agua y mantener una limpieza profunda de los genitales. Antes la menor molestia se debe consultar al médico para evitar que infecciones leves como la uretritis y la sistitis evolucionen a una pielonefritis. Es importante destacar también que un examen general de orina no es un diagnóstico. Se debe hacer un urocultivo con más de 70 mil unidades formadoras de colonias para saber a qué es sensible la bacteria y recetar el antibiótico correcto. – CGO.