“Vamos a ofrecer resultados para involucrar a la sociedad, ese es el camino”
Su chamba no es fácil: Aref Karam y su equipo trabajan en darle a los yucatecos mejor desarrollo urbano, movilidad y conectividad. Sin embargo el director de IMDUT tiene muy en claro que sin empuje y resultados, la cosa no marcha. Esa es una de las premisas de su gestión y el único camino viable que ve para que la sociedad se comprometa con el cambio. Acá te cuenta cómo trabajan en ello
A Aref Karam Espósitos lo persigue la exactitud desde chiquito. Cuando era bebé su papá José –médico cardiólogo- lo adormecía con ritmos cardíacos y ya más de niño, Aref no jugaba con autitos: lo suyo era desarmar y volver a armar relojes. Ah, y no es todo… Ya más de adolescente, se volvió un fanático de las matemáticas.
Tan fanático que, aunque sus padres son los dos médicos -su mamá Josefina es gineco obstetra- y todo indicaba que debía mantener esa herencia profesional, en la secundaria decidió dar un volantazo y, luego de ganar un concurso de matemáticas, tomó la decisión elegir una carrera más afín a su gusto.
La buena nueva es que su papá cardiólogo le dijo: “Tú has lo que quieras, hijo”. Quizás que el hombre que lo adormecía con ritmos cardíacos y le daba relojes viejos para que Aref los desbaratara y volviera a armar como si nada, no imaginó que hoy su hijo sería el director del Instituto de Movilidad y Desarrollo Urbano Territorial (IMDUT) de Yucatán, con la titánica tarea de darle a todos los yucatecos mejor desarrollo urbano, movilidad y transporte así como le gusta a él: lo más exactos posible.
Antes de presentarlo, vale aclarar algo: este niño relojero y adolescente matemático que se convirtió en ingeniero civil, tiene un plus: en su formación siempre le interesaron las ciencias sociales y por eso decidió agregar un ingrediente muy especial que, sin duda, fue determinante para introducirse en el mundo de la función pública: Un doctorado en Gestión Estrategia y Políticas de Desarrollo le demostraron que sí se pueden hacer cosas por y para la gente. Y en esas anda. Ah, y acá él te cuenta quién es:
Defínete en pocas palabras, como en un tweet
Padre, hijo, hermano, esposo, ingeniero, constructor, lector apasionado y por azares del destino funcionario público. Estoy muy contento con todo lo que soy.
¿En qué momento te acercaste al mundo de la movilidad y el desarrollo urbano? ¿Cuál fue el detonante?
Fue en gran medida de a pasitos. Indudablemente mi maestría en Administración y el doctorado en Gestión Estratégica y Políticas de Desarrollo me enseñaron e impulsaron mucho. La parte social, las políticas públicas y todo lo referente a las áreas socioeconómicas me llevaron a hacer el doctorado y eso cambió en gran parte mi vida profesional.
¿Por qué te eligió el entonces alcalde Mauricio Vila para el cargo de director de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento?
Yo nunca antes había sido funcionario público. Trabajaba en mi empresa de construcción y daba clases en la Universidad Marista. Un día me llamaron del equipo de Mauricio cuando él ya era candidato a alcalde y me dijeron “Oye, tenemos tu currículum aquí, queremos entrevistarte”. No sé cómo les llegó, me imagino que lo solicitaron a la universidad, no lo sé realmente. El tema es que mi doctorado tiene mucho que ver con la función pública y pensé que era por eso. Un día me cité con Mauricio, fue una entrevista breve y muy cordial. Él me dijo muy claro qué quería en su gestión: compromiso, más eficacia y cero corrupción. Y le dije que sí.
Si entramos a la página web del IMDUT, la función del instituto es bien larga y habla de diseño, implementación, evaluación de políticas, planeación, desarrollo urbano, movilidad, zonas metropolitanas y conurbaciones. Suena a muchos desafíos, retos y toneladas de trabajo. Cuéntanos con tus palabras cuál es tu chamba y la de tu equipo:
La voy a dividir en dos: trabajamos en la movilidad de la gente y nos enfocamos en hacerla eficiente, segura, al menor tiempo posible y a costo mínimo. El otro gran eje de nuestro trabajo es el desarrollo urbano y esta es la primera vez que un solo organismo se encarga de la parte territorial y urbana de todo el estado ¿Por qué poner un hospital, una escuela, una carretera o una industrial en tal lugar? ¿Cómo se conecta con el entorno? ¿Qué movilidad genera? Determinar esto es parte de nuestro trabajo y lo hacemos en forma transversal con todas las secretarías porque todo es territorio.
Suena mucho y a largo plazo ¿Cuál es tu método de trabajo con tu equipo? ¿Con quiénes trabajas?
Esto no se termina nunca… Vamos al ejemplo de Mérida: tiene 80 mil hectáreas con una mancha urbana que alcanza 26 mil hectáreas. Las ciudades deben ser compactas y no tan expansivas, hay que conseguir que las aglomeraciones de gente sean ordenadas y con calidad de vida. Todo es orgánico y cambia todo el tiempo y hay que adaptarse a esa forma de trabajo. El equipo de instituto es multidisciplinario, trabajo con más mujeres que hombres porque creo mucho en sus capacidades y destaca el compromiso que tienen con lo que se proponen. Hay abogados, contadores, ingenieros, arquitectos, economistas, estadistas y técnicos, que son los que implementan todo lo que se planea. Trabajo con gente que conozco hace mucho tiempo, ya sea desde mi experiencia en la iniciativa privada, como en la función pública.
¿Hace falta un cambio de mentalidad en la gente para lograr todo esto?
Creo que la premisa es comunicar bien desde el Gobierno, esa es una dificultad que se tiene. La enorme mayoría de los ciudadanos está en su día a día y es difícil sacarlos de su entorno porque no piensan en lo macro. Hay que comunicar de forma innovadora y distinta, es una necesidad que tenemos que encontrar para hacer que el ciudadano se entusiasme en participar en la vida comunitaria, en la movilidad y el desarrollo urbano. Hay que vincularlos a que todos entendamos cuáles son nuestros derechos y responsabilidades en la vida pública, desde el que se mueve en auto, en bici o caminando.
¿Cuáles son tus tres primeros pasos o tus premisas para arrancar con la transformación de la movilidad en Mérida y en Yucatán?
Lograr el orden en movilidad. Nuestras vías son caóticas y el espacio público también, es uno de los temas más importantes, de gran valor y un reto que tenemos. Luego buscamos empuje, porque la política pública tiene mucho de planeación y legislación pero, al final de cuentas, si no se plasma en acciones, de nada sirve. Hay una tendencia en la función pública de que todo pase poco a poco y lento. Esa es la dinámica distinta que impone el gobernador Mauricio Vila en su gestión. Vamos por más pragmatismo.
Dos ejemplos en la voz de los ciudadanos:
Alguien que vive en una ciudad satélite como las Américas o Ciudad Caucel tiene mucho tiempo de viaje para llegar a Mérida a trabajar o estudiar ¿Qué solución a mediano o corto plazo podrán tener estos habitantes?
Lo primero que hay que hacer es reordenar, repensar la forma de movernos. Se resuelve con un programa de desarrollo urbano de mediano o largo plazo. Buscamos los “usos mixtos”, que te permitan no desplazarte tanto para cumplir con tus obligaciones. La conectividad es un tema que ha quedado complicado y la solución está en que cada núcleo de la periferia de la ciudad debe tener un muy buen sistema colector de transporte para que te lleve a integrarte a un sistema que inicie del periférico para adentro. En uno o dos años ya veremos mejoras, las soluciones totales vendrán más adelante.
Llegar en camión al centro es un lío… El Centro Histórico estalla y se tarda mucho tiempo ¿Qué solución habrá a mediano o largo plazo?
El centro no debería ser el articulador de la movilidad para aquel que es del norte y quiera ir al sur de la ciudad, por ejemplo. Trabajamos en el diseño de ejes radiales y de circuitos que conecten estos radiales para que no haya que pasar necesariamente por el centro. Es un trabajo robusto, tiene fases y etapas como Situr, que todavía no está implementado en su totalidad. Y también dependemos de los presupuestos y recursos. Este año vamos a obtener mucha información en tecnología para hacer el proyecto ejecutivo de los principales ejes y nos dedicaremos a conseguir recursos para su implementación.
¿Cómo se lleva todo este trabajo a los municipios del interior del estado?
Ya nos empezamos a reunir con los alcaldes de los municipios para plantear modificaciones legales y alineamientos en asentamientos humanos y núcleos de población, a fin de que los municipios puedan mejorar en su orden y desarrollo. Hay que pensarnos como una metrópoli y hay que entender cómo se afectan unos a otros los municipios a fin de procurar una mejor conectividad y movilidad entre todos. Habrá cambios muy significativos en movilidad de transporte en los próximo tres años, sobre todo en la zona metropolitana y en las ciudades intermedias del estado.
¿Cómo se hace para se continúen con los proyectos arrancados en próximas administraciones, sobre todo cuando sus implementaciones son a mediano y largo plazo?
Aquí el gran chiste es que la sociedad civil participe y se involucre. Si están convencidos con una política pública ¿Cómo le hace el que llega para decir que no? Si lo dejamos todo en papelitos, es muy probable que el que llegue le de vuelta a la página. Vamos a ofrecer resultados para involucrar a la sociedad civil y a colegios, universidades y cámaras que son articuladores de resortes que hacen pivote e interpretan las necesidades de la gente para que gestionen ante las autoridades por políticas públicas que tengan sentido. Ese es el camino.
¿Cómo te gustaría terminar esta administración en resultados?
Que tengamos un programa de desarrollo urbano y territorial de todo Yucatán. Me gustaría ver que todas las ciudades del estado con más de 50 mil habitantes tengan su plan de desarrollo urbano. Las demás que cuenten con códigos urbanos generales que regulen el desarrollo. Quiero que logremos también la Ley de Asentamientos Humanos de todos los municipios. En la costa, por ejemplo, esperamos que tenga todo lo compatible con su desarrollo y funcionamiento como turismo, industria, universidades… En cuanto a movilidad quiero calles ordenadas, señalética clara y un sistema de transporte consolidado con circuito y semaforización inteligente. También queremos lograr mecanismos de intermodalidad y multimodalidad para que no sólo nos movamos en transporte público o coche y para eso hay que trabajar en vías más seguras y un sistema inteligente para que la ciudadanía cuente con toda la información a mano.
¿Todo con exactitud, como un reloj que funciona bien o un corazón que late parejo?
Sí, buscando siempre el máximo potencial que Yucatán se merece para lograr mejor calidad de vida para todos.- Cecilia García Olivieri.