¿Cómo te explico la delicia de un kibi adentro de un pan de hogaza?

¿Cómo te relato que esa bolita aplanada a base de trigo, especias, carne y condimentos -legado de la migración libanesa-, marida tan bien en un pan de hogaza, suavecito y con sabor a mantequilla?

¿Cómo te digo que si le ponen repollito y un poquito de chile habanero tus papilas gustativas se pondrán felices y tu cerebro sentirá que toca el cielo?

Eso sí… la famosa “torta de kibi” se tiene que comer cerquita del mar, específicamente en el Puerto de Progreso y si se la compras a doña Yolanda, en su puesto en la puerta del Súper Aki (calle 80 x 29 y 31, Centro), mucho mejor…

Esta mujer de piel curtida por el sol (la gente de la costa tiene la piel dorada ¿Se dieron cuenta?) tiene 75 años y desde los 12 años prepara las tortas de kibis. “Las vendo desde que salían 10 centavos… Los empecé a hacer porque la gente me los pedia y ya son una tradición”, me cuenta con una enorme sonrisa.

Se levanta a las 2 am para preparar todo y hoy día hace como 100… Y los vende todos ¿Los probaste? Cuéntamelo todo… -CGO.