¿Qué tienen los trenes que nos gustan tanto? ¿Qué imán ejerce sobre nosotros esos medios de transporte gigantes, algunos ruidosos que se mueven sobre rieles, y otros más modernos que no corren, sino que vuelan bajito? Yucatán tuvo su época dorada de ferrocarriles pero luego, durante décadas, dejó de ser una opción de movilidad para las y los yucatecos, hasta ahora, con la incorporación del Tren Maya.

Y hoy te tengo una muy buena noticia si eres fan de los trenes de ayer, hoy y siempre. Y es que el Gran Parque de la Plancha recibe desde este día al Museo de los Ferrocarriles, un espacio cultural que tiene la premisa de preservar y difundir un siglo y medio de legado ferrocarrilero de Yucatán y México, apostando a un futuro que corre sobre rieles.

A través de cinco salas, este museo ofrece experiencias inmersivas que te transportarán en vagones del siglo XIX hasta la modernidad del Tren Maya. Uno de las vivencias que más me gustó fue un viaje multisensorial a bordo del tren Mary Lee, un coche de pasajeros de principios del siglo XX transformado en un simulador 4D.

De colofón puedes visitar los vagones de cafetería, con cositas ricas para comer y, al lado del museo, podrás darte una vuelta por la sala de exposiciones temporales, hoy con la muestra “Fibras que hablan, tierra y memoria, 20 años de retrospectiva”, de la artista Marcela Díaz.

El museo está abierto de martes a domingo, de 10 am a 5 pm. Menores de 13 años y yucatecos en domingo entran gratis. Los otros días, yucatecos, estudiantes, maestros y adultos mayores pagan $40, nacionales $80 y extranjeros $120.- CGO.