Saco mi sabucán
Por @laflacadelamor
Columna Viernes Sudaca
Hace unos años en Buenos Aires, desaparecieron las bolsas de plástico. O esa, de la noche a la mañana, ibas al súper y ya no te daban bolsas. “Vea usted cómo se lleva las cosas, buena mujer, o sino me compra estas bolsas ecológicas por $20 y todos contentos”, te decían, más o menos, con otras palabras. Fue un baldazo de agua helada.
Seguramente avisaron, pero nadie prestó demasiada atención. Fue cruel como, de un día para el otro, hacías una compra y no tenías cómo llevarte las cosas. La gente compraba las bolsas ecológicas (al principio no te acordabas de llevarlas a la compra siguiente y así te llenabas de bolsas como estas cada vez que ibas) o directamente pedía cajas para llevar sus compras. Era una locura.
Pero, como a todo, nos fuimos acostumbrando. Y un día te despertabas y, antes de salir de casa, recordabas que de vuelta del trabajo ibas a pasar por el súper, así que metías una bolsa toda dobladita en tu cartera para luego llenarla de cosas cuando pasaras a hacer tu compra. Y así seguimos durante años y puedo decir, sin temor a equivocarme, que nos acostumbramos a hacer a un lado las bolsas de plástico.
Hace poco más de un año y medio que vivimos en Mérida, donde todavía vas al súper o a cualquier tiendita de la colonia y te dan tus compras en las tradicionales bolsas de plástico. Seguramente se preguntarán si me acostumbré de nuevo a usarlas: Les contesto que no, claro que no. Nel. Nop.
Cuando llegamos acá, nos compramos dos tamaños de sabucanes y casi siempre llevo uno en mi cartera. Claro que no es muy grande, pero me saca del apuro cuando voy a comprar cosas por la colonia.
Los sabucanes son preciosos, a mí me encantan. Vienen de colores divertidos, tienen lindas terminaciones y no se rompen aunque les pases un tren por encima. Aguantan cualquier cosa. Además hasta se pueden usar como bolso o cartera, quedan re lindos con un outfit informal y relajado y combinan bien con cualquier color porque vienen en todas las tonalidades.
Esta semana, el Gobierno del Estado mandó una reforma de ley al Congreso para que los legisladores yucatecos estudien y analicen la posibilidad de eliminar el uso de bolsas y popotes de plástico. El cambio sería gradual y se espera que en dos años ya no existen más.
A mí me parece genial y creo que si nos adelantamos nosotros un poco podemos hacer que, en menos de 24 meses, la ley ya sea un hecho. Es una forma de que votemos todos con el ejemplo por el no uso de bolsas de plástico y popotes ¿No les parece?
Por cierto, sigan en Facebook y en Instagram a “Saca tu Sabucán Yucatán”, iniciativa de la amiga Claudia Chapa, por el regreso del sabucán a nuestras vidas y el cuidado del medio ambiente.
¡Larga vida al sabucán!