“No hay nada mejor que ver a una mujer salir del refugio recuperada”
Mérida acciona para ayudar, proteger y empoderar a las mujeres que viven violencia de género y por eso existe y crece el Centro de Atención y Refugio para Mujeres con o sin Hijas e hijos en Situación de Violencia Extrema (CAREM). Martha Pacheco es la coordinadora del lugar y nos cuenta cómo trabajan y qué servicios ofrecen para brindar ayuda integral a mujeres en situación de vulnerabilidad:
Como una labor de “múltiples satisfacciones” que le permite ayudar a la superación de mujeres meridanas que viven situación de violencia de género. Así define Martha Marlene Pacheco Gamboa la labor diaria que realiza en el Centro de Atención y Refugio para Mujeres con o sin Hijas e Hijos en Situación de Violencia Extrema (CAREM). Como servidora y coordinadora responsable del lugar, Martha cuenta que su carrera de Trabajo Social la impulsó a ayudar a sus pares y así ingresó al Instituto Municipal de la Mujer y posteriormente al CAREM.
“Ayudar a la mujer es un tema que me apasiona, de ahí que tomé la decisión de desempeñarme en esta área. Como trabajadora social y coordinadora del CAREM estoy preocupada el su bienestar y seguridad de las niñas y mujeres de Mérida, principalmente ayudar a aquellas que viven en situación de violencia”, explica.
Una de las premisas del Ayuntamiento de Mérida es la de velar por la seguridad de las mujeres y apoyarlas en su desarrollo integral y económico y el Instituto de la Mujer emprende buenas acciones al respecto. “Existen programas que son de gran beneficio para nosotras como por ejemplo Mujeres Seguras en tu Establecimiento, Línea de la Mujer, Juribus, además de que ha hecho inversiones importantes para mejorar el CAREM”, detalla.
Y el trabajo es constante, no paran. Martha señala que lo más complicado es la responsabilidad, “porque el Refugio es un espacio que labora 24 horas los 365 días del año y necesito estar en alerta porque las situaciones de violencia se pueden presentar en cualquier momento”, remarca.
Pero todo tiene su recompensa y para la coordinadora del CAREM no hay nada mejor que ver a una mujer salir del refugio recuperada: “Es una de las más grandes satisfacciones que se puede sentir. No hay mejor sentimiento que ver a una mujer restablecida, con un plan de vida y fuera de este espacio, porque lo ideal es que cada vez sean menos las mujeres que ingresen al CAREM y que la violencia disminuya”, comparte.
Desde la creación del refugio en el año 2006, la operación y el servicio se ha dado de forma continua, con el incremento paulatino de su capacidad para hospedar a las mujeres con o sin hijas e hijos que llegan a este espacio para salvaguarda su vida e integridad por las violencias y violencia extrema vivida.
CÓMO FUNCIONA EL CAREM
En los primeros años de su creación el refugio tenía capacidad para hospedar a cuatro núcleos familiares de 2006 a 2009. En 2010-2018, se hizo una remodelación en las instalaciones y el refugio incrementó el número de hospedajes a ocho núcleos familiares de 2012-2018 y de 2019 a la fecha; con una siguiente remodelación en el 2018, se incrementó el número 12 núcleos familiares hospedadas de forma simultánea.
Los servicios que se ofrecen en el refugio son gratuitos, confidenciales, con instalaciones seguras y con los servicios necesarios para salvaguardar la integridad de las familias que ingresan y decidan llevar a cabo un proceso de resignificación de la violencias o violencias vividas. Funciona las 24 horas del día los 365 días del año.
Desde el inicio de la pandemia por el COVID-19, se generaron estrategias de prevención y educación dentro del CAREM, que evitó una clausura de los servicios que ofrece el refugio por número de contagios que se pudieran presentar.
En el refugio, se brinda hospedaje, así como alimentación, asesoramiento jurídico, acompañamiento psicológico y atención de trabajo social a través de las gestiones médicas y asistenciales que se requieran durante su estancia.
Si vives situación de violencia de género o conoces a alguien, no dudes en contactar al Instituto de la Mujer de Mérida: