“La vacuna es noble, es buena y no hay que tenerle miedo”
Seguimos rodeados de héroes en y de pandemia y hoy te presentamos a una heroína chiquita, de mirada blanca y sonrisa oculta. Ella se llama Llanili Aké y desde enero pasado vacuna a yucatecos contra el covid-19. Como personal de salud en tiempos de coronavirus, Llanili nos cuenta cuál es su experiencia diaria y porqué es tan importante vacunarse. No te lo pierdas:
Es chiquita, movediza y debajo de ese cubrebocas, esconde una sonrisa. Los ojos le brillan y hacen juego con el blanco impecable de su uniforme. Llanili Aké Moo tiene una mirada blanca, esperanzadora, con buena vibra y cuando habla transmite tranquilidad. Y nos dice: “La vacuna es noble, es buena” y nosotros le creemos de principio a fin.
Desde enero de 2021 -cuando arrancó el proceso de vacunación contra el nuevo coronavirus en Yucatán- Llanili, mujer enfermera de 34 años, se anotó en la convocatoria del Insabi para vacunar. También desde que comenzó la pandemia trabaja con pacientes enfermos de covid en la Clínica Mérida y esta fue una excelente oportunidad para esta trabajadora del sector salud de seguir ayudando a los demás. Y así lo hizo… Y así lo sigue haciendo.
La encontramos en el Centro de Convenciones Yucatán Siglo XXI un día como ayer, cuando comenzó la aplicación de dosis a adultos de 40 a 49 años. El lugar está lleno de gente y ella está feliz. “Jamás me imaginé vivir una pandemia y realmente me siento muy bien y emocionada de trabajar en el área de vacunación, me encanta el ambiente, ver gente, vacunar… Son días intensos y cansados, pero estoy feliz”, asegura.
Llanili evoca en su memoria el primer día de vacunación, en enero pasado. Fue hace sólo cinco meses, pero parece un momento lejano en su vida, aunque lo recuerda. “Fue un día de enero aquí en el Siglo XXI y me tocó vacunar a una compañera del sector salud. Las dos estábamos emocionadas y teníamos miedo también. En ese entonces no sabíamos qué reacción podía hacer la dosis. Recuerdo que fue Pfizer y todo estuvo bien”, rememora. A ella la vacunaron también en ese momento por ser personal de salud de covidario.
Hoy las miles de personas en Yucatán del sector salud que aplican dosis contra el covid-19 laboral a full. Llaniti nos cuenta que, en el Siglo XXI, ingresan a trabajar a las 7 am y se van cuando abandona el lugar el último vacunado, siempre después de las 6 pm.
CONFIANZA EN LA VACUNA
“Desde que comenzamos con la aplicación de dosis a la fecha notamos un cambio rotundo en la gente para bien. Al principio venían con miedo, hacían miles de preguntas y tenían dudas sobre todo respecto a las reacciones. Cuando comenzó a pasar el tiempo y fue ‘saldo blanco’ en cuanto a gente que tuviera alguna situación adversa por la vacunación, se nota que la gente ya no tiene miedo y viene, se acerca, siempre está concurrido”, relata.
Y seguramente es inevitable hacer preguntas si te vas a vacunar ¿Verdad? Llanili nos cuenta qué quiere saber la gente cuando recibe sus dosis de Cansino, Sinovac, AstraZeneca o Pfizer:
“Las que más hacen preguntas son las mujeres y los más miedosos son los hombres. Lo primero qu quieren saber es: ‘¿Me va a doler?’ y después te preguntan qué tipo de vida pueden llevar, si es conveniente trabajar ese mismo día, estar al sol, tomar alcohol o alguna dieta específica”, detalla.
Llanili nos cuenta que lo mejor es llevar una vida normal, excepto por el consumo de alcohol: “Es conveniente no beber alcohol durante dos días porque si tienes alguna reacción a la vacuna, el alcohol en la sangre puede confundir los síntomas”, explica. También aclara que si tomas medicamentos, debes seguir haciéndolo, excepto alguna contraindicación médica.
“La vacuna es noble, es muy buena y no hay que tenerle miedo. Los invito a que se vacunen, no les va a pasar nada y aquí los esperamos”, finaliza, con una mirada blanca y una sonrisa –seguramente- de oreja a oreja.- Cecilia García Olivieri.
(Las imágenes son del colega Roberto Ortíz).